Probablemente, hace un par de décadas nadie se imaginaría hablar de teleconsulta o consultas médicas no presenciales como presente o un futuro muy reciente. La irrupción de la telemedicina y de la Salud Digital con el desarrollo tecnológico que está suponiendo para los sistemas sanitarios ha abierto la puerta a la implantación de nuevos modelos asistenciales.
Muchas veces el médico no puede llegar a donde quisiera y el paciente tampoco. Por cuestiones de distancia o enfermedad, por ejemplo, ante esto las consultas médicas no presenciales son toda una oportunidad para resolver las carencias de profesionales sanitarios y medios del sistema.
“Los teléfonos convencionales, los teléfonos móviles, el email y otras herramientas similares podrían haber sido usadas para resolver muchas situaciones que llevan a una persona a “ir al médico”
Se trata de buscar la eficiencia y la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud (SNS) apostando poco a poco por herramientas como las consultas telefónicas, por videollamada o correo electrónico. Evitando así acortar los distintos recorridos administrativos que deben realizar diariamente muchos pacientes, con los desplazamientos que conllevan y su coste en tiempo.
El informe 'Diez temas candentes de la Sanidad española en 2019' elaborado por el Círculo de Empresarios recoge esta idea. “Los teléfonos convencionales, los teléfonos móviles, el email y otras herramientas similares podrían haber sido usadas para resolver muchas situaciones que llevan a una persona a “ir al médico”. La barrera no ha sido la ausencia de tecnología sino los obstáculos regulatorios, estructurales y la falta de incentivos para los médicos”, sostiene este análisis realizado por esta organización sin ánimo de lucro que preside John de Zulueta.
VISITAR AL MÉDICO YA NO SERÁ NECESARIO
Un informe de 2014 de Deloitte estima que ese año se produjeron 100 millones de teleconsultas en el mundo (un 75% de ellas en Estados Unidos), lo que supone un incremento de 400% respecto a 2012. ¿Qué conclusión se puede sacar de esto? Que las consultas médicas no presenciales son ya una realidad.
A través del teléfono, de un correo electrónico o una videollamada, así será la atención médica en el futuro más reciente. Consultas con los facultativos en remoto que permitan el diagnóstico de ciertas patologías o el seguimiento de enfermedades crónicas, por ejemplo.
"Los 1.000 millones de euros que se gasta el Estado en médicos rurales podrían destinarse a pagar profesional sanitario que atienda desde su hospital y con buenos equipos de Telemedicina a pacientes de estas zonas"
Recientemente en ConSalud.es, Juan Láriz, cofundador de Gádaca, una app hecha en España que permite tener al médico online en cualquier parte del mundo, relató hacia donde están los avances de las TICs en este ámbito. Gádaca es una app que incluye el historial médico actualizado y disponible en cualquier momento, métricas de seguimiento de salud, portabilidad de las recetas en el móvil, alarmas para la medicación.
"Es difícil encontrar médicos para las zonas rurales. Cuestan entre 100 y 200 euros más por persona y año que un facultativo que trabaja en una ciudad y no atiende al mismo número de pacientes. Son 1.000 millones de euros al año que se podrían utilizar eficazmente para que un profesional sanitario atienda desde su hospital y con unos buenos equipos de Telemedicina", asegura Juan Láriz.
INICIATIVAS EN DESARROLLO
En España, diversas comunidades autónomas testan este tipo de modelos asistenciales. Existen proyectos pilotos y otros puestos en marcha en comunidades autónomas como Madrid, Andalucía, Castilla y León, Galicia, Canarias. Además, casi todas las comunidades autónomas, disponen de servicios de teleconsulta en sus propios centros de salud evitándose desplazamientos a los centros de atención especializada. Sistemas similares se utilizan desde hace tiempo para conexión entre Atención Primaria y Especializada, por ejemplo, en cuestiones como la Dermatología.
El reto para el Sistema Nacional de Salud, y el conjunto del sistema sanitario español, está en preparar toda la infraestructura tecnológica que dé soporte a estos servicios sanitarios online.