La “bioelectrónica viva” podría ser una realidad gracias a un estudio de la Universidad de Chicago. Se trata de una investigación liderada por el laboratorio del profesor de química Bozhi Tian, que ha trabajado para integrar el cuerpo y la tecnología.
Concretamente, este equipo ha creado un prototipo de “bioelectrónica viva” que combinaría células vivas, gel y tecnología. Según se explica desde la propia universidad, este descubrimiento "podría integrarse con el tejido vivo".
Se trata de una unión de tres "capas": sensores, células bacterianas y un gel elaborado a partir de almidón y gelatina. Pengju Li, coautor del estudio, ha destacado que "este dispositivo permite la medición no invasiva de la electrofisiología del corazón directamente desde la superficie de la piel", eliminando así los dispositivos complejos.
Se trata de una unión de tres "capas": sensores, células bacterianas y un gel elaborado a partir de almidón y gelatina
Por su parte, Tian ha recalcado que "estamos muy entusiasmados porque este estudio ha tardado una década y media en desarrollarse". No en vano, si bien ya existen algunos dispositivos que se emparejan con el cuerpo humano, como por ejemplo los marcapasos, "tienden a ser voluminosos y rígidos, y pueden causar irritación".
Por ello, para desarrollar esta investigación, se ha adoptado un nuevo enfoque. "Normalmente, la bioelectrónica consta de los propios componentes electrónicos y una capa suave para que sean menos irritantes para el cuerpo", se ha explicado.
El nuevo planteamiento añade el componente más importante, las células vivas. Algunas bacterias que viven naturalmente en la piel humana pueden tener propiedades curativas o que reduzcan la inflamación.
Algunas bacterias que viven naturalmente en la piel humana pueden tener propiedades curativas
"Cuando el dispositivo se coloca sobre la piel, las bacterias secretan compuestos que reducen la inflamación y el sensor monitoriza la piel en busca de señales como la temperatura y la humedad de la piel", se informa.
Según se ha detallado, en pruebas con ratones que padecían afecciones cutáneas similares a la psoriasis, se produjo una reducción significativa de los síntomas. Los investigadores quieren que este dispositivo pueda utilizarse durante medio año o más.
Además del tratamiento de la psoriasis, los científicos destacan aplicaciones como parches para acelerar la cicatrización de heridas o el diagnóstico de enfermedades. "Por ejemplo, ¿podríamos crear un dispositivo que produzca insulina o un dispositivo que interactúe con las neuronas?", concluye el investigador principal Tian