La pandemia Covid-19 supuso un reto a nivel sanitario en varios sentidos, desde la mortalidad a la trasmisión a la mayor campaña de vacunación de la historia. Un esfuerzo nacional e internacional que comenzó con un gran hito: el desarrollo en cuestión de meses de vacunas eficaces para evitar la enfermedad grave producida por el SARS-CoV-2. De ahí se saltó al siguiente paso: distribuir y administrar estos sueros de forma universal a toda la población de todos los países del mundo.
La compleja logística que se elaboró a raíz de esta situación ha impulsado la digitalización en el campo de la vacunación. Los registros de abastecimiento, distribución y administración, o la generación del Certificado Covid a raíz de los datos sobre la vacunación, todo ello ha sido posible gracias a la transformación digital, como destacaron desde la Asociación Europea de Gestión Sanitaria (EHMA por sus siglas en inglés) en el webinar ‘Reforzar el ecosistema de vacunas de la UE: Gestionar la transformación digital’.
Dr. Pérez: “La inteligencia artificial está tomando mucho peso en investigación. También es una cuestión importante la distribución, pero el punto fundamental del espacio europeo de datos sanitarios es la historia clínica y la digitalización del registro de vacunas"
En 2022 se puso en marcha el espacio europeo de datos sanitarios. Actualmente este se encuentra determinando su legislación, para proteger los millones de datos que se compartirán en este espacio y al que tendrán acceso profesionales, pacientes e investigadores para cambiar la atención de los pacientes, para mejorar la investigación y la innovación o generar políticas sanitarias más ajustadas a la realidad. Se estima que el ámbito de la vacunación será el que más se beneficie de los cambios que se están dando.
Como señalaba Elena Moya, vocal y coordinadora de Relaciones Internacionales del Foro Español de Pacientes tras el webinar de la EHMA, el sector farmacéutico "es muy particular", con productos como la vacunas que son un elemento vivo: precisan de medidas constantes de seguridad y control para medir su eficacia, a veces les toca actualizarse para enfrentar las mutaciones que se producen en distintos virus como el de la influenza causante de la gripe o el de SARS-CoV-2. Y en este contexto existe la necesidad de contar con información trasparente y con base científica, calendarios de vacunación armonizados en Europea y el aterrizaje de la digitalización, como expusieron diferentes expertos en el webinar de la EHMA.
DESARROLLO, PRODUCCIÓN Y MEJOR GESTIÓN
“La inteligencia artificial está tomando mucho peso en investigación. También es una cuestión importante la distribución, pero el punto fundamental del espacio europeo de datos sanitarios es la historia clínica y la digitalización del registro de vacunas, que ya se está aplicando”, explica el Dr. Jaime Pérez, especialista en medicina preventiva y salud pública y presidente de la Asociación Española de Vacunología (AEV) a SaluDigital.es.
Según señala la EHMA en su hoja de ruta, los avances tecnológicos permiten acelerar el descubrimiento y desarrollo de nuevas vacunas, lo que a su vez aumenta la eficacia en la producción de estos productos. Acceder a ellos puede ser más sencillo si se hace uso de las nuevas tecnologías, también facilita el seguimiento y distribución de las dosis, lo que es, en definitiva, la gestión y la logística de la vacunación.
La pandemia ha supuesto un gran paso en la transición digital, con los datos sobre la cobertura de la vacunación Covid-19 en países, regiones y grupos demográficos tanto a nivel europeo, ofrecido por el Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades (ECDC por sus siglas en inglés), como a nivel europeo, ejemplo de ello el informe de vacunas y de casos desarrollado por el Ministerio de Sanidad a través de datos de las comunidades autónomas. La implementación del certificado europeo de vacunación Covid-19 supuso también un importante ejemplo del papel de la digitalización en un ecosistema europeo fortalecido.
“La digitalización puede cambiar el futuro de la vacunación en función de muchas cuestiones, desde la historia clínica a la que el paciente pueda acceder desde una app, a estudios epidemiológicos"
Para que esta experiencia se amplíe en todo el ámbito de las vacunas es necesario que exista una voluntad política, se mejore el liderazgo y la colaboración, se invierta en innovación para fortalecer los sistemas europeos y aumentar la confianza existente en las vacunas. En el documento ‘Fortalecimiento del ecosistema europeo de vacunación: gestión de la transición digital’ de EHMA señala una serie de recomendaciones para que tanto a nivel europeo como nacional o regional se lleve a cabo la digitalización de la vacunación. Para ello, recoge el informe, es preciso asegurarse que el espacio de datos podrá recopilar, compartir y usar los datos sobre el desarrollo, despliegue y eficacia de las vacunas; que exista una interoperabilidad y cooperación entre los miembros de la Unión Europea.
Además, indican, es necesario que los profesionales sanitarios cuenten con preparación y capacidades para esta transformación digital; se cree un sistema para poder compartir datos, calendario, accesibilidad o rutina de vacunación a nivel europeo, como se hizo con el pasaporte Covid; se implementen estándares para conseguir un seguimiento y mantenimiento del suministro y distribución de las vacunas, que permita realizar compras eficientes y reducir el desperdicio. Se estima que solo España tuvo que destruir el pasado diciembre de 2022 14 millones de vacunas.
Con la experiencia durante la pandemia y estas recomendaciones se pone la base de una transición que está en camino. “La digitalización puede cambiar el futuro de la vacunación en función de muchas cuestiones, desde la historia clínica a la que el paciente pueda acceder desde una app, a estudios epidemiológicos. Se necesitarán muchos datos, es un desafío para el que todavía queda camino”, señala el presidente de la AEV. Para llegar a ello hay que superar unas cuantas barreras sobre la renuencia de pacientes y profesionales de compartir sus datos o crear una plataforma que permita la integración de todos los datos que se recojan con redes coordinadas. “Se está avanzando en el registro centralizado de vacunas a nivel nacional, por ejemplo, pero es una cuestión compleja y con muchos desafíos”, concluye el Dr. Jaime Pérez.