Enfermeras del Centro Médico Wexner de la Universiadad Estatal de Ohio (Estados Unidos) han desarrollado unos calcetines inteligentes que pueden reducir y prevenir las caídas en los pacientes de alto riesgo durante su hospitalización. Los calcetines contienen sensores de presión que alertan a las tres enfermeras más cercanas cuando el paciente intenta ponerse de pie, para que puedan llegar y brindar asistencia lo antes posibles.
El sistema, esta interconectado a través de una red inalámbrica de intercambio de datos. Además, también incluye unatablet en la habitación de cada paciente, un servidor local, un dispositivo de monitorización en el puesto de enfermería y dispositivos de notificación "Smart Badge" que llevan las enfermeras.
Cuando los calcetines detectan un intento de levantarse, el sistema avisa a las tres enfermeras que se encuentra más cerca de la habitación de la alarma a través de sus insignias. Cuando una enfermera entra en la habitación del paciente, la alerta se desactiva automáticamente. Si ninguna de esas enfermeras entra en la habitación en los primeros 60 segundos, la alarma pasa a las tres siguientes más cercanas. Si nadie responde en 90 segundos, el sistema procede a realizar una "llamada general" a todas las tarjetas inteligentes registradas en la unidad que emite la alarma.
“Un problema importante con los sensores de presión de cama y silla es que la gran cantidad de falsas alarmas puede causar 'fatiga de alarma' que puede contribuir a una respuesta retrasada”, segura Tina Bodine, investigadora involucrada en el estudio. “Con este sistema no se detectaron caídas y solo el 0,2% de las alertas fueron falsas alarmas. También analizamos los tiempos de respuesta de las enfermeras que oscilaron entre 1 segundo y casi 10 minutos y descubrimos que la mediana del tiempo de respuesta de las enfermeras fue de 24 segundos”
Una caía puede acarrear graves consecuencias para los pacientes frágiles y vulnerables y, a menudo, puede ser el comienzo de una espiral descendente de salud. Por lo general, no es posible monitorear a los pacientes de alto riesgo cada minuto del día, pero las tecnologías inalámbricas son adecuadas para cumplir una función de asistencia en este contexto.
"Con este sistema no se detectaron caídas y solo el 0,2% de las alertas fueron falsas alarmas"
“Debido al rápido envejecimiento de la población, es previsible que la cantidad de pacientes con mayor riesgo de caídas en los hospitales aumente sustancialmente”, comenta Bodine. “Se cree que alrededor del 30% de las caídas en el hospital se pueden prevenir, por lo que es importante determinar mejores formas de evitar que nuestros pacientes se caigan mientras están hospitalizados”.
“Los pacientes pueden caerse mientras están hospitalizados, y esto a veces puede provocar lesiones o la muerte. Sabemos que las medidas de prevención de caídas existentes no funcionan de manera consistente”, dijo Tammy Moore, otra investigadora involucrada en el estudio. "Durante nuestro estudio, observamos cero caídas, que fue una tasa de caídas más baja entre los pacientes que usaban estos calcetines que la tasa de caídas histórica de 4 caídas por 1000 días-paciente".