Una nueva herramienta para la filtración de sangre podría extraer del organismo, mediante el uso de imanes, infecciones muy severas como la malaria o la sepsis. Esta nueva tecnología, impulsada por la compañía británica MediSieve, funciona de manera similar al proceso de diálisis.
En concreto, se extrae la sangre de los individuos y se incluyen las partículas magnéticas. Éstas se adhieren a elementos específicos, con el objetivo de ser apresados por un filtro magnético, que procede a su retirada de la sangre antes de que se introduzca de nuevo en el sistema circulatorio de los pacientes. El sistema, que se basa en la nanotecnología, comprende un periodo que se extiende de las dos hasta las cuatro horas.
"Sentimos realmente que podemos lograr un impacto humano importante para ayudar a aquellos individuos que más padecen la enfermedad, con especial incidencia en los niños y las mujeres embarazadas"
George Frodsham, fundador y CEO de MediSieve, señala que esta es "una herramienta potencial muy poderosa" porque, en teoría, puedes eliminar una gran cantidad de sustancias: "venenos, patógenos, virus, bacterias… cualquier elemento que podamos unir y sea factible para ser excluido del cuerpo humano".
"Si cuando algún paciente tiene un tumor, se extirpa, ¿por qué no deshacerse de la misma forma de estos elementos nocivos de la sangre? Gracias a múltiples investigaciones, ahora sabemos que puede ser una realidad; tan solo es necesario resolver una serie de detalles técnicos para que su efectividad sea máxima", sostiene Frodsham.
Tal y como apuntan los autores de la investigación, la malaria va a ser la primera patología en la que se va a analizar su efectividad. No obstante, el primer paso con esta enfermedad no es necesario, puesto que la malaria confronta con las células sanguíneas ricas en hierro y consume hemoglobina, lo que las convierte en magnéticas.
"El tratamiento frente a la malaria es una técnica más avanzada porque las células infectadas ya poseen estas propiedades magnéticas", declara Frodsham, quien añade que "sentimos realmente que podemos lograr un impacto humano importante para ayudar a aquellos individuos que más padecen la enfermedad, con especial incidencia en los niños y las mujeres embarazadas", sentencia.