En las cirugías de columna, con el objetivo de estabilizar la columna vertebral, a menudo se suelen utilizar tornillos perpendiculares. De hecho, su colocación de forma precisa es esencial para obtener resultados exitosos. Por ello, en los últimos años se ha estado trabajando en el desarrollo de sistemas de navegación asistida por robot (RAN) y realidad aumentada (RA), para la cirugía de columna.
La RAN implica el uso de brazos robóticos para guiar los instrumentos operados por el cirujano con la ayuda de imágenes 3D de la anatomía del paciente y tecnología de navegación similar a GPS. Esto permite realizar procedimientos mínimamente invasivos que se planifican de antemano empleando software especializado.
Paralelamente a esto, la cirugía de columna asistida por RA supone imágenes 3D de la columna vertebral del paciente sobre la vista del cirujano durante la cirugía mediante un casco de realidad aumentada, con la planificación quirúrgica basada en tomografías computarizadas preoperatorias. Ante este escenario, se ha llevado a cabo un estudio que compara ambas técnicas, llegando a la conclusión de que tanto RAN como RA proporcionaron gran precisión y seguridad para la colocación de tornillos pediculares.
Las cirugías se realizaron en la columna para tratar afecciones degenerativas, y fue un cirujano experimentado quien realizó todos los casos asistidos por robot
Dicho estudio ha sido realizado por investigadores del Hospital for Special Surgery, en Nueva York, e involucró a 212 pacientes adultos sometidos a cirugía de columna. En total, fueron colocados 1.211 tornillos pediculares utilizando RAN (827 tornillos en 108 pacientes) o RA (384 tornillos en 104 pacientes) entre junio de 2020 y octubre de 2023.
Las cirugías se realizaron en la columna para tratar afecciones degenerativas, y fue un cirujano experimentado quien realizó todos los casos asistidos por robot. Dos cirujanos más utilizaron el sistema RA para las cirugías restantes. La colocación de cada tornillo pedicular se evaluó después de la cirugía mediante tomografías computarizadas o fluoroscopia 3D, y la precisión se calificó utilizando el sistema de clasificación de Gertzbein-Robbins, que categoriza la colocación de los tornillos como A, B, C o D.
Los grados A y B se consideraron aceptables, donde el grado A representa un tornillo colocado completamente dentro del pedículo y el grado B indica un tornillo que estaba hasta 2 mm fuera de la posición deseada. Los grados C y D se consideraron inaceptables. Fueron dos cirujanos de columna independientes los encargados de evaluar la colocación de los tornillos, y no se encontraron diferencias significativas entre las dos técnicas.
En cuanto a la precisión, el 99,6 % de los tornillos colocados con RAN se clasificaron como Grado A o B, mientras que el 98,7 % de los tornillos colocados con RA recibieron la misma calificación. En general, el 92,6 % de los tornillos se clasificaron como Grado A, lo que indica un alto nivel de precisión en ambos métodos.
"En comparación con las técnicas convencionales de manos libres, tanto la navegación asistida por robot como el uso de realidad aumentada han demostrado una precisión superior"
“En comparación con las técnicas convencionales de manos libres, tanto la navegación asistida por robot como el uso de realidad aumentada han demostrado una precisión superior. Nuestro estudio es el primero en comparar directamente la RAN con la RA con respecto a la precisión de la colocación de los tornillos”, afirmó Darren R. Lebl, cirujano de columna y director de investigación en HSS, e investigador principal del estudio.
“Nuestros resultados confirmaron una excelente precisión para ambas técnicas, lo que hace que tanto la robótica como la RA sean herramientas seguras para la colocación precisa de los tornillos pediculares lumbosacros. Sin embargo, se observó una mayor tasa de tornillos de grado A en el grupo RAN, lo que potencialmente destaca la precisión superior de la robótica”, concluye.