¿Un parche en la nuca para predecir el riesgo de conmoción cerebral en deportes de alto impacto? Ahora es posible. Un grupo de investigadores han desarrollado un parche sensor pequeño y flexible que, llevado en la nuca, puede predecir el riesgo de conmoción cerebral en deportes como el fútbol americano, el rugby, el judo, el karate o el boxeo.
Así se describe en un estudio publicado en la revista Scientific Reports, que informa de un dispositivo es capaz de detectar tensiones repentinas en el cuello, como el latigazo cervical, en un maniquí de prueba. Tal y como recoge Mayo Clinic, un latigazo cervial es una lesión que se produce por un movimiento rápido y enérgico del cuello hacia atrás y hacia adelante. Aunque suele estar causado por accidentes de tráfico, también puede deberse a deportes, abuso físico y otros traumatismos, como una caída.
En deportes de contacto como los descritos anteriormente, las posibles colisiones y accidentes pueden causar movimientos del cuello y lesiones que, en el peor de los casos, pueden acabar en una conmoción cerebral. Este tipo de lesion cerebral supone una breve pérdida de la función cerebral normal y ocurre debido a golpes en la cabeza que provocan que se mueva bruscamente hacia adelante o hacia atrás, de forma que el cerebro impacta contra el cráneo.
Entre los síntomas de este tipo de lesión se encuentran las convulsuiones, somnolencia o dificultad para caminar, dolor de cabeza, debilidad, vómitos o náuseas, confusión, dificultad para hablar o pérdida del conocimiento. La mayoría de personas que sufren una conmoción cerebral se recuperan de forma natural tras la lesión.
El parche podía predecir con hasta un 90% de eficacia las posibilidades de conmoción cerebral
Aunque ya existen protecciones y dispositivos que ayudan a reducir este impacto, como los sensores basados en acelerómetros que detecan el movimiento al colocarse en los cascos, estos suelen ser muy grandes y además, pueden dar lecturas falsas cuando el casco se mueve en la cabeza de la persona.
Sin embargo, ahora, los investigadores han desarrollado un nuevo sensor que utiliza una capa de material termoplástico (nanogenerador ferroelectrolítico) que produce energía eléctrica cuando se toca o presiona. Esta señal eléctrica es proporcional a la tensión física en el cuello, por lo que sirve para estimar la aceleración y la velocidad del movimiento repentino del cuello, indicadores clave para predecir una posible conmoción cerebral.
Para testar este dispositivo, los desarrolladores pusieron el parche en la nuca de un maniquí con sensores basados en la aceleración y un giroscopio dentro de la cabeza. Acto seguido, dejaron caer al falso atleta desde una altura suspendida de 61 centímetros para simular un latigazo cervical. Tras analizar los resultados, descubrieron que el parche podía predecir con hasta un 90% de eficacia las posibilidades de conmoción cerebral.
De este modo, los autores de este trabajo concluyen que este parche podría utilizarse para medir los latigazos cervicales, a la vez que podría ser clave en la detección de la conmoción cerebral.