Un estudio dirigido por investigadores del UCLA Jonsson Comprehensive Cancer Center descubrió que las imágenes por resonancia magnética, o MRI, frecuentemente subestiman el tamaño de los tumores de próstata, lo que puede conducir a un tratamiento insuficiente.
Los autores del estudio encontraron que tal subestimación ocurre con mayor frecuencia cuando el tamaño del tumor medido por resonancia magnética es pequeño y la puntuación PI-RADS, que se utiliza para clasificar las lesiones en el análisis de resonancia magnética de próstata, es baja.
Para que los tratamientos de tumores de próstata tengan éxito, tanto la medición del tamaño de la resonancia magnética como la puntuación PI-RADS deben ser precisas porque permiten a los médicos determinar con precisión dónde terminan los tumores y dónde comienza el tejido normal y sano que los rodea.
Los investigadores compararon el tamaño del tumor medido por resonancia magnética con el tamaño real del tumor después de la extirpación de la próstata
La resonancia magnética se usa con frecuencia para diagnosticar y tratar el cáncer de próstata. También se usa cada vez más como un medio para mapear y guiar la administración de terapias nuevas y altamente enfocadas que usan congelación (crioterapia), ultrasonido (HIFU) y calor (ablación con láser) para destruir el tejido canceroso en la glándula prostática sin afectar el tejido sano.
Los investigadores compararon el tamaño del tumor medido por resonancia magnética con el tamaño real del tumor después de la extirpación de la próstata en 441 hombres tratados por cáncer de próstata.
Mejorar la capacidad para predecir mejor los márgenes de ablación permitirá tratamientos más exitosos para hombres con cáncer de próstata y puede ayudar a reducir la morbilidad del tratamiento del cáncer de próstata.