La resonancia magnética puede definir y detectar con mayor precisión malformaciones de la cabeza, el cuello, el tórax, el abdomen y la columna en los recién nacidos, según un nuevo estudio multidisciplinario.
Concretamente, en el estudio, publicado en Lancet Child and Adolescent Health, los investigadores han demostrado las formas en que la resonancia magnética puede mostrar malformaciones con gran detalle, incluido su efecto en las estructuras circundantes.
Así, este nuevo estudio se ha basado en corregir el movimiento fetal en la resonancia magnética del cerebro fetal y, más recientemente, en obtener imágenes del corazón fetal.
El estudio se ha basado en corregir el movimiento fetal en la resonancia magnética del cerebro fetal de los bebés
La resonancia magnética se usa comúnmente en la clasificación de anomalías cerebrales fetales. Aunque su uso en anomalías corporales fetales está menos adoptado, los avances han llevado a la validación de su papel en la investigación prenatal de varias afecciones, incluida la investigación de fetos con espina bífida.
Para las masas del cuello fetal, la resonancia magnética proporciona una clara ventaja sobre la ecografía convencional para evaluar la extensión del tumor y brindar una visualización en 3D de la relación del tumor con las vías respiratorias.
La resonancia magnética también puede ser mejor que la ecografía para distinguir entre el tejido pulmonar normal y anormal, y para hacer otros diagnósticos como la hernia diafragmática, particularmente al final de la gestación, cuando hacerlo con una ecografía es un desafío.
Los nuevos enfoques para obtener imágenes del cuerpo fetal con MRI permiten tanto la corrección del movimiento de las imágenes fetales como la reconstrucción del volumen de los órganos y defectos del cuerpo.