Alrededor de entre un 2 y un 4% de los pacientes sufren una infección del sitio quirúrgico después haberse sometido a un cirugía. Esta tasa puede aumentar aún más en ciertos procedimientos, como puede ser el implante de una malla vaginal para hacer frente al prolapso. Para luchar contra este problema y las superbacterias que puedan desarollarse, la Universidad RMIT de Melbourne (Australia) ha trabajado en un material con propiedades antimicrobianas y que puede verse fácilmente en las imágenes médicas.
Un equipo de investigación multidisciplinario formado por expertos en nanoingeniería, biomedicina y textiles trabajaron en asociación con un cirujano en ejercicio para desarrollar la versión de prueba del material. En las pruebas de laboratorio realizadas por el equipo, publicadas en OpenNano, el filamento quirúrgico ensartado a través de muestras de carne de pollo fue fácilmente visible en las tomografías computarizadas, incluso después de tres semanas. El filamento quirúrgico también demostró fuertes propiedades antimicrobianas al eliminar el 99% de las bacterias altamente resistentes a los medicamentos después de seis horas a temperatura corporal.
Para conseguirlo, la sutura combina el yodo y nanopartículas, llamadas puntos de carbono. Los puntos de carbono son inherentemente fluorescentes, debido a su particular longitud de onda, pero también se pueden ajustar a diferentes niveles de luminosidad que se destacan fácilmente del tejido circundante en imágenes médicas. Al unir yodo a estos puntos de carbono, obtienen fuertes propiedades antimicrobianas y una mayor visibilidad de rayos X.
Los investigadores creen que aborda un serio desafío al que se enfrentan los cirujanos al tratar de identificar la ubicación anatómica precisa de las mallas internas en las tomografías computarizadas
Según los investigadores, los nanopuntos de carbono son seguros, económicos y fáciles de producir en el laboratorio a partir de ingredientes naturales. Los investigadores creen que aborda un serio desafío al que se enfrentan los cirujanos al tratar de identificar la ubicación anatómica precisa de las mallas internas en las tomografías computarizadas. Los investigadores ahora realizarán ensayos preclínicos para los que producirán muestras de sutura más grandes.
"Nuestras suturas quirúrgicas inteligentes pueden desempeñar un papel importante en la prevención de infecciones y el control de la recuperación del paciente, y el material de prueba de concepto que hemos desarrollado tiene varias propiedades importantes que lo convierten en un candidato interesante para esto", dijo el Dr. Shadi Houshyar, autor principal del estudio y becario investigador sénior del vicerrectorado de la Escuela de Ingeniería de la Universidad RMIT.
"Esta malla nos permitirá ayudar con una mejor identificación de las causas de los síntomas, reducir la incidencia de infecciones de la malla y ayudará con la planificación preoperatoria precisa, si es necesario retirar quirúrgicamente esta malla", dijo el cirujano colorrectal consultor y profesor de cirugía en la Universidad de Melbourne, Justin Yeung, quien participó en el estudio. “Tiene el potencial de mejorar los resultados de la cirugía y mejorar la calidad de vida de una gran proporción de mujeres si se usa como malla vaginal, por ejemplo, al reducir la necesidad de retirar la malla infectada. También puede reducir significativamente la duración de la cirugía y aumentar la precisión quirúrgica en general a través de la capacidad de visualizar la ubicación de la malla con precisión en las imágenes preoperatorias”.