Un estudiante de laboratorio de la Universidad de Ohio (Estados Unidos) Peeyush Shrivastava, con tan solo 17 años, comenzó en el año 2013 a estudiar las propiedades magnéticas de las células cardiacas. Al darse cuenta de que la tecnología de sensores que estaba manejando podría ampliarse para ser clínicamente útil, decidió compaginar su asistencia al centro de estudios con la creación de su propia startup, Genetesis.
Gracias a esta iniciativa, el joven pudo desarrollar un novedoso dispositivo, llamado CardioFlux, que consiste en un escáner corporal con tecnología de magnetocardiografía (MCG), que mide los diminutos campos magnéticos generados naturalmente por el corazón. Puede parecerse a una resonancia magnética, pero no implica la emisión de un campo magnético.
El nuevo dispositivo permite generar un informe con imágenes dinámicas del corazón con un escaneo de 90 segundos
En comparación con la máquina estándar actual, que implica horas de observación seguidas de una prueba de esfuerzo de electrocardiograma, el nuevo dispositivo es significativamente más cómodo para los pacientes, menos costoso e incluso, según se ha demostrado, más preciso que el tradicional.
CardioFlux es más cómodo, menos costoso y más preciso que las máquinas tradicionales
Llegados a este punto, la startup ha atraído la atención del fabricante de chips gráficos NVidia y Thiel Fellowship. Además, el empresario y magnate de los negocios Mark Cuban es uno de sus inversores más leales.
El CEO y fundador de Genetesis, Peeyush, ha apuntado que una vez que el sistema reciba la aprobación de la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos), prevista para finales de este año, se comenzará a desarrollar todavía más el potencial clínico del nuevo producto. Asimismo, la compañía ya está estudiando el uso de la magnetocardiografía para monitorear las arritmias fetales y algunas otras enfermedades.