Más allá del frío de un quirófano, de la compañía de robots de última generación y del “roce” de los rayos X, cualquier intervención sanitaria tiene como eje común el paciente. Un usuario de la sanidad, que más allá de la eficiencia, comienza a reclamar empatía.
Con el objetivo de que la innovación no desequilibre la atención sanitaria hacia una eficiencia “no humanizada”, las administraciones sanitarias comienzan a ocuparse de la “humanización” en salud. Un término que, aunque no guste a todos los públicos, por no considerar que nuestra actual sanidad esté deshumanizada, comienza a estar en boca de políticos y gestores.
¿Es posible unir tecnología sanitaria y humanización? Distintas iniciativas demuestran que sí. De hecho, expertos del ámbito tecnológico aseguran que uno de los secretos del éxito de la tecnología en el futuro será invertir en el lado humano de la tecnología y no únicamente en la inteligencia artificial.
Expertos del ámbito tecnológico aseguran que uno de los secretos del éxito de la tecnología en el futuro será invertir en el lado humano de la tecnología y no únicamente en la inteligencia artificial
De este modo, nacen soluciones como VitalMinds, de Philips. Consiste en un conjunto de dispositivos, software y procesos, que permite reducir episodios de delirio y alucinaciones, confusión o desorientación en las UCIS. Todo ello mediante una correcta gestión de elementos como la luz (respetando el ciclo circadiano) y el sonido (reduciendo los niveles de ruido en el entorno del paciente). De este modo, sus desarrolladores buscan convertir las Unidades de Cuidados Intensivos en lugares más amables.
Esta misma línea es la que sigue el proyecto Imatgina en Radiología infantil. La Fundación Philips, la Fundación CurArte, y el Servicio de Radiología Pediátrica del Hospital Vall D’Hebron se unían en 2016 para desarrollar esta iniciativa, cuyo fin es mejorar la experiencia del niño antes de las pruebas “mediante un concepto integral de ambientación e incorporando elementos como la educación y la gamificación”. Para esto último, se diseñó ScanKids, una aplicación gamificada destinada a niños de entre 6 y 12 años destinada a que pierdan el miedo. La aplicación les enseña con términos comprensibles y animaciones 3D de las salas y de la tecnología de imagen radiológica, qué pasos tienen que seguir en cada momento y qué pueden esperar de cada prueba.
ScanKids es una aplicación que enseña a los niños con términos comprensibles y animaciones 3D de las salas y de la tecnología de imagen radiológica, qué pasos tienen que seguir en cada momento y qué pueden esperar de cada prueba
ScanKids incluye las cinco pruebas de diagnóstico por imagen más habituales para los niños en un hospital: Rayos X, TAC, Resonancia Magnética, Ecografía y Telemando. Los pequeños, guiados por sus padres, cuidadores o profesionales sanitarios, deben elegir la prueba y la zona anatómica que se va a analizar. A partir de ese momento, un personaje, niño o niña, les acompaña en todos los pasos a seguir. Al finalizar la explicación de las pruebas, hay dos juegos relacionados con la anatomía que permiten entretenerse y aprender.
A esto se le suma el ambiente creado en cada una de las salas en las que se realizan las distintas pruebas y en las salas de espera. “La temática elegida para abstraer a los niños de las paredes blancas y luces frías típicas de un hospital ha sido el espacio. Se han creado ilustraciones que les transportan a una aventura galáctica en la que ellos, junto con los personajes del videojuego, se convierten en astronautas a la conquista de su bienestar. El TAC se convierte en sí mismo en una nave espacial que, combinado con la iluminación inteligente de la sala, hace de la experiencia del niño algo mágico y espectacular”, apuntaban desde Fundación CurArte, durante la presentación.
APPS Y MENSAJERÍA QUE HUMANIZAN
Hace unos días el Hospital Universitario La Paz daba a conocer “En calma en el quirófano”, una aplicación gratuita que ayuda a pacientes a reducir el estrés previo a una operación o una prueba médica invasiva. El programa ha sido desarrollado por profesionales sanitarios del servicio de Psiquiatría, Psicología Médica y Salud Mental de La Paz.
En concreto, la app ofrece ejercicios basados en mindfulness o atención plena para fortalecer la confianza y disminuir la ansiedad. Asimismo, comprende un programa de entrenamiento corto o largo en función del tiempo que dispone el paciente para prepararse, según se trata de una intervención programada o más urgente.
A su vez, el programa permite realizar una evaluación del estado emocional antes de hacer los ejercicios y de volverla a hacer después de realizarlos. “Esta evaluación es importante y es una forma de hacer consciente y visualizar el beneficio inmediato que los ejercicios pueden tener”, apuntan sus desarrolladores.
Con la intención de reducir el estrés no solo a los pacientes, sino a sus familiares o acompañantes, hay innovadores proyectos, como el galardonado en los II Premios SaluDigital en la categoría de “Mejor proyecto en fase de desarrollo”. Se trata en Navandu, un asistente digital de información al paciente quirúrgico impulsado por el Instituto de Investigación del Hospital Universitario La Princesa, que pone a disposición de los familiares un servicio de información en tiempo real a través de un asistente accesible, como un "contacto virtual" en las aplicaciones de mensajería como 'Telegram' o 'Whatsapp'.