Los cigarrillos electrónicos de Juul Labs y otras compañías podrían tener los días contados en Estados Unidos. La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) ha dejado la puerta abierta a su prohibición y le ha dado a las principales marcas que 60 días para que planteen una estrategia que ayude a mitigar las ventas en menores de edad, según la información publicada por Reuters. El ‘boom’ entre los jóvenes está causando una auténtica epidemia que, como apunta la FDA, amenaza con crear una nueva generación de adictos a la nicotina.
"Vemos signos claros de que el uso de cigarrillos electrónicos por parte de los jóvenes ha alcanzado una proporción epidémica", afirma el comisionado de la FDA, Scott Gottlieb. En este sentido, asegura que la agencia también revisará la ampliación del plazo para que algunos fabricantes de cigarrillos electrónicos obtengan la aprobación de la FDA antes de vender sus productos.
De este modo, si las empresas no toman medidas lo hará la Administración estadounidense pudiendo llegar a prohibir los populares cigarrillos con sabor.
Más de 2 millones de estudiantes de secundaria y bachillerato usaron cigarrillos electrónicos en 2017 en EE.UU, según la FDA.
La amplia oferta de este tipo de productos, entre los que también se incluyen los vaporizadores, está poniendo en alerta a las autoridades sanitarias. Se han extendido como la pólvora y el uso es habitual entre menores debido a que estos fabricantes comercializan sabores como caramelo o chicle que llama la atención de los adolescentes.
La FDA alerta de que más de 2 millones de estudiantes de secundaria y preparatoria usaron cigarrillos electrónicos en 2017.
En caso de que la FDA prohíba la venta de los cigarrillos electrónicos, Juul sería la compañía más perjudicada ya que tiene el 72% de cuota del mercado, según Wells Fargo.