Un equipo interdisciplinario de la Universidad de Nottingham ha utilizado la última tecnología de imágenes químicas para identificar contaminantes en la heparina a nanoescala, un descubrimiento que los fabricantes podrían utilizar para mejorar la calidad y seguridad de este fármaco anticoagulante.
Concretamente, usando una técnica de imágenes químicas de última generación llamada Espectrometría de masas de iones secundarios de tiempo de vuelo (ToF-SIMS), los investigadores han desarrollado un nuevo enfoque analítico que es más de 100 veces más sensible para detectar contaminantes en la heparina, además de ser más rápido.
Los investigadores han desarrollado un nuevo enfoque analítico que es más de 100 veces más sensible para detectar contaminantes en la heparina
Esta técnica lanza haces de iones positivos de alta energía en la superficie de la muestra para producir iones secundarios. Estos iones después se aceleran a un analizador de tiempo de vuelo y donde se puede medir su masa. El espectro de iones proporciona una medición detallada de la composición química de la muestra.
Esta nueva técnica es escalable para uso comercial con la capacidad de analizar una gran cantidad de muestras a la vez.
La heparina es un glicosaminoglicano (GAG) de origen natural, pero también se usa ampliamente como medicamento. A menudo se usa como anticoagulante (diluyente de la sangre) antes y después de la cirugía, pero también se usa en diálisis renal y en el procesamiento de sangre.