Un estudio nuevo sugiere que la tecnología de mapeo cerebral basada en tomografía óptica puede ayudar a comprender cómo se desarrollan en los bebés afecciones como el autismo y la parálisis cerebral.
Desarrollado por investigadores del Colegio Universitario de Londres, la Universidad de Cambridge y otras instituciones, el gorro de tomografía óptica difusa de alta densidad (HD-DOT) utiliza cientos de diodos emisores de luz (LED) y detectores ópticos dispuestos en una red densa sobre el cuero cabelludo para mapear los cambios en la oxigenación en el cerebro, creando imágenes tridimensionales (3D) de alta calidad de la actividad cerebral sin la necesidad de un escáner de imágenes por resonancia magnética (RM).
Utilizando un paradigma de estímulo social bien establecido, los investigadores demostraron que es posible obtener imágenes funcionales de alta calidad del cerebro infantil utilizando HD-DOT, con restricciones ambientales mínimas.
El sistema se puede utilizar para crear una amplia gama de matrices de imágenes flexibles y ultralivianas que incorporan cientos de emisores y detectores de luz
Los resultados fueron consistentes con las medidas de espectroscopía funcional de infrarrojo cercano de baja densidad (fNIRS), pero mostraron una localización espacial superior, una especificidad de profundidad mejorada, una relación señal/ruido más alta (SNR) y una mejora dramática en la consistencia de las respuestas entre los participantes.
HD-DOT aprovecha la electrónica flexible para producir sensores livianos y de perfil ultrabajo que se pueden interconectar directamente para formar matrices de imágenes.
Al combinar varios módulos a través de un conector integrado de placa a placa, el sistema se puede utilizar para crear una amplia gama de matrices de imágenes flexibles y ultralivianas que incorporan cientos de emisores y detectores de luz en el CIR para obtener imágenes de forma segura de la corteza del cerebro infantil.