Los usamos a diario. Expresan felicidad, cariño, tristeza o enfado. Complementan nuestros mensajes y ahora, los emojis podrían dar el paso al campo de la medicina. Los emojis – palabra de origen japonés a partir de e, ‘imagen’ y moji, ‘letra, carácter’ – nacieron en el país nipón hace una década. Desde entonces, han cambiado nuestra forma de comunicarnos. Se estima que se utilizan alrededor de cinco billones de estos mini-dibujos a diario solo en Facebook.
De los cientos de emojis que existen, alrededor de 45 podrían ser relevantes en la Medicina. Los primeros en introducirse fueron la jeringuilla y la pastilla, en 2015. Dos años más tarde, Apple introducía varios emoticonos para representar a las personas con diversidad funcional, como la pierna robótica o el bastón guia, y ya en 2019, se incluía el emoji del estetoscopio, hueso, diente y microbio.
Shuhan He, autor del estudio y co-creador del emoticono del corazón anatómico y el pulmón, incorporados en 2020, trabaja ahora juno con Debbie Lai y Jennifer Lee, para incluir 15 emojis más relacionados con el campo de la medicina.
En una situación de emergencia donde el tiempo es crítico, un emoji podría ser una forma de comunicación sencilla
“Es tentador desvalorizar los emojis como una moda millennial, pero tienen el poder de la estandarización, la universalidad y la familiaridad y, en manos de los médicos y otros profesionales sanitarios, podrían ser una nueva y altamente efectiva manera de comunicarse gráficamente con los pacientes”, asegura He.
En este sentido, en una situación de emergencia donde el tiempo es crítico, un emoji podría ser una forma de comunicación sencilla, facilitando las decisiones clínicas relevantes. Los emoticonos podrían aplicarse para determinar el grado de dolor de los pacientes, síntomas e incluso humor. Además, podrían serían útiles en recetas e instrucciones médicas, que pueden llegar a ser muy confusas e incluso incomprensibles para algunos pacientes.
Junto con el avance de la telemedicina, motivado en gran parte por la pandemia de Covid-19, esta tecnología tan implantada en nuestra vida diaria, se constituye como una gran oportunidad en la práctica médica.
En esta línea, He sugiere que "está claro que los emojis se han convertido en parte de las conversaciones normales a nivel global, por lo que las sociedades científicas, así como los comités médicos, debemos tenerlos en cuenta. Esto significa que deberíamos determinar qué emojis podrían ser de interés para los pacientes, creando consenso alrededor de los mismos y trabajando para estandarizarlos y adaptarlos en la práctica”.