Los pacientes más graves de los hospitales, es decir, todos aquellos que se encuentran en situación crítica con enfermedades graves y potencialmente peligrosas para la vida, requieren un seguimiento estrecho y constante, por lo que es necesario que se encuentren en un espacio restringido donde haya una concentración de medios tecnológicos y de personal sanitario.Hasta ahora, eran las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) las destinadas para ello, pero en los últimos años hemos ido viendo la variación del concepto que las engloba…
Australia ha sido uno de los países pioneros en recoger los avances de la Medicina Interna. De hecho, recientemente, laUniversidad de Macquarie, Emory Healthcare y Philips han conseguido poner en marcha la primera UCI por monitoreo a distancia mediante un programa que permite el monitoreo remoto en tiempo real para la intervención temprana a través de la tecnología y los algoritmos audiovisuales que pueden predecir los deterioros de la salud en pacientes de alto riesgo.
En España, poco a poco, se va consiguiendo algo parecido…Como explica el doctor Federico Gordo Vidal, jefe del Servicio de Medicina Intensiva del Hospital Universitario del Henares a SaluDigital, por el momento no todos los hospitales están capacitados para desarrollar este tipo de unidades, pero la ideade “UCI sin paredes”, basada en la detección precoz en pacientes en riesgo de forma multidisciplinar en plantas convencionales y urgencias, se está consolidando.
“Se ha comprobado que los pacientes antes de llegar a una situación tan complicada se encuentran primero en una fase en la que nosotros, como profesionales, podemos detectar qué enfermos son los que están en un riesgo mayor de desarrollar episodios graves”, apunta Gordo.
En este sentido, si los profesionales sanitarios se adelantan en el tratamiento utilizando alternativas más adecuadas y precoces se puede conseguir una reducción en los tiempos de estancia en UCI, así como la mejora del pronóstico del paciente. “Se trata de aplicar una medicina preventiva y adelantarnos a los acontecimientos”, concreta.
ElHospital del Henares ha demostrado por tanto, que este modelo de trabajo beneficia a los pacientes potencialmente graves aumentando su superviviencia. Especialmente si hablamos de enfermedades como la sepsis, el síndrome coronario agudo y la parada cardiorrespiratoria, las cuales suelen estar precedidas dealteraciones fisiopatológicas detectables y prevenibles.
Además, gracias a las nuevas tecnologías y a la aplicación de los sistemas informáticos se ha conseguido, al igual que en Australia, mejorar un sistema específico de alarma que combina datos clínicos y analíticos proporcionando un árbol de decisión sobre las actuaciones iniciales y la necesidad de aviso a la UCI.
El jefe del Servicio de Medicina Intensiva de este centro hospitalario madrileño asegura que “los algoritmos inteligente se encargan de crear alertas sobre los pacientes en riesgo para que se pueda detectar en todo el centro. Son monitores a pie de cama que nosotros podemos controlar desde la UCI”.
Concretamente, “Guardian” funciona como un semáforo que tiene en cuenta diferentes datos, como parámetros vitales, mediciones objetivas y valoraciones del personal de enfermería. Consta de tres elementos: por una parte, transmisores sin cables que envían la información del paciente; por otra parte, monitores de paciente que registran estos datos, y, por último, un software al que se transmite toda esta información.
El proceso se divide en cinco fases: toma de datos de admisión; toma de constantes al paciente seleccionado, trascripción de los datos a su ficha y cálculo del marcador de gravedad, acción de acuerdo con los protocolos establecidos en función del resultado del marcador de gravedad, y trascripción de datos al sistema de información departamental de planta.
De esta manera, se consigue aumentar la seguridad del paciente, ya que al enlazar las plantas de hospitalización con la propia UCI, se facilita la comunicación y el intercambio de información, reduciendo las estancias innecesarias en la UCI o anticipándolas en caso de ser necesario.
HUMANIZANDO LA MEDICINA INTERNA
Por otra parte, según señala el doctor Gordo a SaluDigital, “se ha comprobado que es bueno que los pacientes estén en la planta con su familia y en una situación más confortable. La humanización es una materia pendiente de todas las especialidades de la medicina, un objetivo común y firme del que nadie tiene duda”.
Esto repercute tanto en el bienestar y comodidad de los pacientes como en la eficiencia del sistema, así como en mejorar sus resultados en términos de salud.
“El Big Data nos va a impulsar a una mejora de la atención de los pacientes con sistemas informáticos potentes y sistemas de monitorización cada vezmenos invasivos y más fáciles de utilizar”, concluye el especialista con vistas al futuro del control remoto en este ámbito.
"El concepto “UCI sin paredes” se basa en la detección precoz en pacientes en riesgo desde urgencias y las plantas convencionales"
Australia ha sido uno de los países pioneros en recoger los avances de la Medicina Interna. De hecho, recientemente, laUniversidad de Macquarie, Emory Healthcare y Philips han conseguido poner en marcha la primera UCI por monitoreo a distancia mediante un programa que permite el monitoreo remoto en tiempo real para la intervención temprana a través de la tecnología y los algoritmos audiovisuales que pueden predecir los deterioros de la salud en pacientes de alto riesgo.
“Se ha comprobado que los pacientes antes de llegar a una situación tan complicada se encuentran primero en una fase en la que nosotros, como profesionales, podemos detectar qué enfermos son los que están en un riesgo mayor de desarrollar episodios graves”, apunta Gordo.
En este sentido, si los profesionales sanitarios se adelantan en el tratamiento utilizando alternativas más adecuadas y precoces se puede conseguir una reducción en los tiempos de estancia en UCI, así como la mejora del pronóstico del paciente. “Se trata de aplicar una medicina preventiva y adelantarnos a los acontecimientos”, concreta.
ElHospital del Henares ha demostrado por tanto, que este modelo de trabajo beneficia a los pacientes potencialmente graves aumentando su superviviencia. Especialmente si hablamos de enfermedades como la sepsis, el síndrome coronario agudo y la parada cardiorrespiratoria, las cuales suelen estar precedidas dealteraciones fisiopatológicas detectables y prevenibles.
Además, gracias a las nuevas tecnologías y a la aplicación de los sistemas informáticos se ha conseguido, al igual que en Australia, mejorar un sistema específico de alarma que combina datos clínicos y analíticos proporcionando un árbol de decisión sobre las actuaciones iniciales y la necesidad de aviso a la UCI.
"Los algoritmos inteligentes se encargan de crear alertas a través de monitores a pie de cama que nosotros podemos controlar desde la Unidad de Cuidados Intensivos"
Se trata del Sistema Guardian y también permite detectar alteraciones en las constantes vitales de aquellos pacientes ingresados en las diferentes plantas de hospitalización, evitando así su ingreso en la UCI o controlando a aquellos que ya han estado allí y se ha procedido a su traslado a planta.El jefe del Servicio de Medicina Intensiva de este centro hospitalario madrileño asegura que “los algoritmos inteligente se encargan de crear alertas sobre los pacientes en riesgo para que se pueda detectar en todo el centro. Son monitores a pie de cama que nosotros podemos controlar desde la UCI”.
Concretamente, “Guardian” funciona como un semáforo que tiene en cuenta diferentes datos, como parámetros vitales, mediciones objetivas y valoraciones del personal de enfermería. Consta de tres elementos: por una parte, transmisores sin cables que envían la información del paciente; por otra parte, monitores de paciente que registran estos datos, y, por último, un software al que se transmite toda esta información.
El proceso se divide en cinco fases: toma de datos de admisión; toma de constantes al paciente seleccionado, trascripción de los datos a su ficha y cálculo del marcador de gravedad, acción de acuerdo con los protocolos establecidos en función del resultado del marcador de gravedad, y trascripción de datos al sistema de información departamental de planta.
De esta manera, se consigue aumentar la seguridad del paciente, ya que al enlazar las plantas de hospitalización con la propia UCI, se facilita la comunicación y el intercambio de información, reduciendo las estancias innecesarias en la UCI o anticipándolas en caso de ser necesario.
HUMANIZANDO LA MEDICINA INTERNA
"El Big Data nos va a impulsar a una mejora de la atención de los pacientes con sistemas informáticos potentes y sistemas de monitorización cada vezmenos invasivos y más fáciles de utilizar"
Por otra parte, según señala el doctor Gordo a SaluDigital, “se ha comprobado que es bueno que los pacientes estén en la planta con su familia y en una situación más confortable. La humanización es una materia pendiente de todas las especialidades de la medicina, un objetivo común y firme del que nadie tiene duda”.
Esto repercute tanto en el bienestar y comodidad de los pacientes como en la eficiencia del sistema, así como en mejorar sus resultados en términos de salud.
“El Big Data nos va a impulsar a una mejora de la atención de los pacientes con sistemas informáticos potentes y sistemas de monitorización cada vezmenos invasivos y más fáciles de utilizar”, concluye el especialista con vistas al futuro del control remoto en este ámbito.