Un equipo de investigadores de la Universidad de Columbia (Estados Unidos) ha desarrollado un dispositivo robótico que puede ayudar a las personas con lesiones en la médula espinal a mejorar el control sobre su tronco, permitiéndoles sentarse de manera más estable y expandir su rango de movimiento.
Atendiendo a detalles concretos, la herramienta se basa en un cinturón motorizado que se adhiere al torso y que aplica fuerzas a medida que los usuarios completan los movimientos de la parte superior del cuerpo. Por lo tanto, el dispositivo está destinado a reducir las caídas y mejorar las capacidades de movimiento en pacientes con lesiones de la médula espinal, que suelen ser usuarios en sillas de ruedas.
Cuando los pacientes utilizaron el sistema, expandieron significativamente lo lejos que podían llegar, aumentando el espacio de trabajo sentado alrededor de su cuerpos en, aproximadamente, un 25%
Es preciso recordar que los pacientes con lesiones de la médula espinal pueden tener dificultades para realizar actividades mientras están sentados en sus sillas de ruedas. Así, uno de los problemas más frecuentes con las caídas mientras se realizan tareas cotidianas como alcanzar cualquier objeto. De este modo, mejorar el control del tronco en estos pacientes podría ayudarles a aumentar su estabilidad y reducir su riesgo de caída.
Los científicos han bautizado a este sistema como entrenador del soporte del tronco (TruST, por sus siglas en inglés Trunk-Support Trainer) y, tal y como explican, su propósito es capacitar a un usuario para expandir su espacio de trabajo activo mientras está sentado. "Diseñamos TruST para personas con lesiones de la médula espinal, que suelen ser usuarios en silla de ruedas", señala Sunil Agrawal, uno de los investigadores involucrados en el estudio.
El propio Sunil Agrawal continúa su intervención declarando que su grupo descubrió que "TruST no solo evita que los pacientes se caigan, sino que también maximiza los movimientos del tronco más allá del control postural de los pacientes o los límites del equilibrio".
El sistema consiste en un cinturón que se sitúa alrededor del torso de un usuario. Así, la correa está unida a cables motorizados que pueden aplicarle varios grados de fuerza a medida que el usuario realiza movimientos. El mecanismo permite al usuario realizar movimientos de la parte superior del cuerpo que, de otro modo, no podría realizar sin usar sus manos para lograr una estabilidad adicional.
Hasta el momento, el equipo de investigación ha probado su dispositivo en un estudio piloto con cinco pacientes con lesión de médula espinal. Los individuos realizaron movimientos de la parte superior del cuerpo, donde movieron su tronco lo más lejos posible en ocho direcciones diferentes sin la ayuda de sus manos. Cuando los pacientes utilizaron el sistema, expandieron significativamente lo lejos que podían llegar, aumentando el espacio de trabajo sentado alrededor de su cuerpos en, aproximadamente, un 25%.
"La capacidad de TruST para proporcionar retroalimentación de fuerza continua personalizada para los límites posturales del usuario abre nuevas fronteras para implementar paradigmas basados en el aprendizaje motor y reentrenar la funcionalidad en personas con lesiones de la médula espinal", sentencia Victor Santamaria, otro de los investigadores involucrados en el estudio.