Un equipo de investigadores de la Universidad de Minnesota, ha desarrollado un dispositivo portátil de detección de luz impreso en 3D que puede ayudar a las personas con enfermedades sensibles a la luz, como el lupus, a comprender más sobre los tipos de luz que pueden aumentar sus síntomas. Las personas con lupus son sensibles a diferentes tipos de luz, como la luz solar o incluso la luz interior, pero es posible que no sepan qué condiciones de luz específicas pueden causar brotes.
Este nuevo dispositivo tiene como objetivo proporcionar a estas personas más información, para que puedan aprender más sobre sus brotes y tomar medidas para evitarlos o al menos reducirlos. La tecnología podría conducir a una medicina más personalizada y una mayor comprensión de las enfermedades sensibles a la luz.
Aproximadamente cinco millones de personas en todo el mundo viven con lupus y entre el 40 y el 70 % de ellas experimentan algún tipo de sensibilidad a la luz. Estos pueden incluir erupciones,fatiga y dolor en las articulaciones. La sensibilidad a la luz parece variar de un paciente a otro, lo que dificulta brindar consejos sobre qué situaciones evitar y cómo reducir la probabilidad de brotes mediados por la luz.
“Trato a muchos pacientes con lupus o enfermedades relacionadas y, clínicamente, es difícil predecir cuándo van a empeorar los síntomas de los pacientes”, explica David Pearson, uno de los creadores del nuevo dispositivo. "Sabemos que la luz ultravioleta y, en algunos casos, la luz visible, pueden causar brotes de síntomas, tanto en la piel como internamente, pero no siempre sabemos qué combinaciones de longitudes de onda de luz contribuyen a los síntomas", asegura.
Aproximadamente cinco millones de personas en todo el mundo viven con lupus y entre el 40 y el 70 % de ellas experimentan algún tipo de sensibilidad a la luz
El dispositivo completamente impreso en 3D contiene óxido de zinc, que puede convertir un estímulo de luz ultravioleta en una señal eléctrica. Está construido sobre una base de silicona y contiene filtros ópticos que se pueden intercambiar según el tipo de luz que se pretenda medir.
“No hay otro dispositivo como este en este momento con este potencial de personalización y fabricación tan fácil”, dijo Pearson. “El sueño sería tener una de estas impresoras 3D en mi oficina. Podría ver a un paciente y evaluar qué longitudes de onda de luz queremos evaluar. Entonces podría simplemente imprimirlo para el paciente y dárselo. Podría ser 100 por ciento personalizado a sus necesidades. Hacia allí se dirige el futuro de la medicina”.
Así funciona el dispositivo: