Los investigadores de Mount Sinai han descubierto que los complejos Polycomb, grupos de proteínas que mantienen los patrones de expresión génica, son esenciales para el desarrollo adecuado de la piel, según un artículo publicado en Genes & Development.
Concretamente, este último descubrimiento podría mejorar el desarrollo de futuras terapias con células madre para generar "piel en un plato" para trasplantar en víctimas de quemaduras y pacientes con trastornos que ampollan la piel.
Los complejos Polycomb son grupos de proteínas que mantienen los patrones de expresión génica durante el desarrollo temprano regulando la estructura del ADN y las proteínas en las células. Desempeñan un papel fundamental en la represión de la expresión génica o en la desactivación de genes individuales para ayudar a controlar las respuestas a los entornos y estímulos cambiantes. Los investigadores encontraron que el complejo represivo Polycomb 1 (PRC1) y el complejo represivo Polycomb 2 (PRC2) ayudan a mantener el patrón de expresión génica específico de la piel necesario para el desarrollo adecuado de la piel.
Los ratones que fueron criados sin ninguno de los complejos Polycomb todavía tenían una barrera cutánea funcional
Los investigadores estudiaron los complejos de Polycomb en la piel en desarrollo de ratones. Los ratones que fueron criados sin ninguno de los complejos Polycomb todavía tenían una barrera cutánea funcional, aunque con defectos menores en el grosor de la piel.
Por el contrario, cuando los investigadores criaron ratones que carecían de ambos complejos, se produjeron defectos cutáneos graves, incluida una epidermis significativamente delgada que carecía de las capas esenciales necesarias para la supervivencia. Los investigadores encontraron que PRC1 y PRC2 ayudan a mantener la función regular de la represión génica, en particular la represión de los factores de transcripción esenciales para la formación de tejidos distintos de la piel.
No obstante, si bien los complejos de Polycomb son importantes para la función de la piel, se desconoce su papel en otros tejidos. Por ello, estudios futuros deberían explorar el papel de los complejos de Polycomb en el desarrollo y la regeneración de tejidos.