Un nuevo estudio de la UMC de Ámsterdam, publicado en la revista científica Neurology, presenta un gorro de baño con electrodos que puede diagnosticar un derrame cerebral en la ambulancia, lo que permite que el paciente reciba el tratamiento adecuado más rápidamente. El neurólogo Jonathan Coutinho, uno de los autores, apunta que esta investigación demuestra que el gorro de baño puede reconocer con gran precisión a pacientes con un gran infarto cerebral. “Esta es una muy buena noticia, porque puede, en última instancia, salvar vidas al llevar a los pacientes directamente al hospital adecuado”.
Gracias a este dispositivo, consiguen conocer si hay un infarto cerebral y si el vaso sanguíneo cerebral bloqueado es grande o pequeño. Una distinción que determina el tratamiento final, ya que en el caso de un infarto pequeño, al paciente se le administra un anticoagulante; en el caso de un infarto grande, el coágulo debe eliminarse en un hospital especializado.
“Con un infarto cerebral, cada minuto cuenta. Cuanto antes comencemos el tratamiento adecuado, mejores serán los resultados. Si el diagnóstico ya está claro en la ambulancia, el paciente puede ser trasladado inmediatamente al hospital adecuado, lo que ahorra un tiempo valioso”, aclara Coutinho.
“Esta es una muy buena noticia, porque puede, en última instancia, salvar vidas al llevar a los pacientes directamente al hospital adecuado”
El gorro de baño inteligente, que contó con la participación del tecnólogo clínico Wouter Potters y el profesor de radiología Henk Marquering, también de la UMC, se probó en doce ambulancias entre 2018 y 2022, consiguiendo los datos de aproximadamente 400 pacientes. Posteriormente, con el objetivo de convertir este dispositivo en n producto comercializado, fundaron TrianecT.
En la actualidad, se está llevando a cabo un estudio de seguimiento (AI-STROKE) que recopilará aún más mediciones para, en última instancia, desarrollar un algoritmo centrado en el reconocimiento aún mejor de un infarto cerebral grave en la ambulancia.
Además, la Fundación del Corazón y la Fundación Cerebro de Países Bajos también han reconocido la importancia de la detección precoz y recientemente han destinado 4 millones de euros a una investigación a gran escala para el tratamiento del infarto cerebral. La investigación sobre el diagnóstico de accidentes cerebrovasculares en ambulancia es una parte importante de esta subvención.