La neumonía es una enfermedad que, si no se trata a tiempo, puede ser mortal. Por tanto, la detección rápida de esta es fundamental para proporcionar un tratamiento eficaz, sobre todo en aquellos casos en los que la enfermedad ha sido adquirida en el hospital, lo que significa que puede ser más grave. Sin embargo, los enfoques diagnósticos actuales tardan varios días en obtener los resultados definitivos, lo que dificulta a los médicos recetar el tratamiento adecuado.
Por ello, los investigadores del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) han desarrollado una tecnología basada en nanopartículas que puede mejorar la velocidad del diagnóstico. Además, estas partículas también pueden utilizarse para monitorear si la terapia con antibióticos ha tratado la infección con éxito.
Pero para poder llevar a cabo el desarrollo de esta tecnología, los investigadores desarrollaron antes un enfoque de diagnóstico que amplifica una señal de biomarcadores ya presentes en el cuerpo, específicamente, enzimas llamadas proteasas, que cortan otras proteínas.
Los investigadores han desarrollado un segundo sensor basado en nanopartículas que puede monitorear la respuesta inmune de la persona a la infección
Después, el equipo desarrolló nanopartículas recubiertas con péptidos (proteínas cortas) que pueden ser cortadas por ciertas proteasas, como las expresadas por las células cancerosas. Cuando estas partículas se inyectan en el cuerpo, se acumulan en los tumores, si hay alguno, y las proteasas cortan los péptidos de las nanopartículas. Estos péptidos se eliminan como desechos y pueden detectarse mediante un simple análisis de orina.
Ahora, para su nuevo estudio en el diagnóstico de la neumonía, los investigadores han desarrollado un segundo sensor basado en nanopartículas que puede monitorear la respuesta inmune de la persona a la infección. Estas nanopartículas están cubiertas por péptidos que son escindidos por un tipo de proteasa llamada elastasa, que es producida por células inmunes llamadas neutrófilos.
De esta manera, en algunos pacientes con neumonía, incluso si un antibiótico elimina las bacterias que causan la infección, una radiografía de tórax puede mostrar inflamación debido a que los neutrófilos todavía están activos. El uso conjunto de estos dos sensores podría revelar si un antibiótico ha eliminado la infección, en los casos en que una radiografía de tórax todavía muestra inflamación después del tratamiento.
''Los sensores pueden ayudar a distinguir si hay una infección e inflamación, en lugar de una inflamación y no una infección'', ha señalado Sangeeta Bhatia, unas de las investigadoras de esta tecnología.