Un nuevo material gelatinoso promete reparaciones inmediatas en una amplia variedad de órganos y tejidos dañados en el cuerpo humano. Este descubrimiento es fruto de científicos de la Universidad de Ottawa que han combinado la tecnología biomédica con la ingeniería inspirada en la naturaleza.
Esta innovadora investigación podría potencialmente transformar millones de vidas mediante el uso de hidrogeles a base de péptidos diseñados para sellar heridas en la piel, administrar agentes terapéuticos al músculo cardíaco lesionado o ayudar en la remodelación y curación de las córneas dañadas.
Los péptidos son moléculas orgánicas que se encuentran en los organismos vivos, mientras que los hidrogeles son sustancias gelatinosas a base de agua que ya han demostrado su utilidad en aplicaciones terapéuticas.
Estos hidrogeles son personalizables, pudiendo adaptar su adhesividad o alterando otras propiedades para satisfacer las necesidades de reparación específicas del cuerpo
Muchos de los hidrogeles utilizados en ingeniería de tejidos, derivan de fuentes animales y están basados en proteínas, pero a diferencia de éstos, el nuevo biomaterial desarrollado gracias al esfuerzo colaborativo de la Universidad de Ottawa (Ontario, Canadá) incorpora péptidos especialmente diseñados, lo que mejora su aplicabilidad clínica. La clave de su utilidad reside en su modificabilidad.
Los hidrogeles del equipo de investigadores de la Universidad de Ottawa están diseñados para ser altamente personalizables. Fabricado con un material robusto, se puede adaptar a las diferentes necesidades de los tejidos ajustando su adhesividad o alterando otras propiedades para satisfacer las necesidades de reparación específicas del cuerpo.
Según los líderes de este proyecto, sus hallazgos no sólo indican que los hidrogeles son muy eficaces para uso terapéutico, sino que su aplicación también es más sencilla y rentable que otros métodos regenerativos. Afirman que al ser “de bajo costo y escalables”, estos materiales poseen características críticas para un uso biomédico generalizado.
“El equipo se inspira en la naturaleza para desarrollar soluciones simples para el cierre de heridas y la reparación de tejidos”
El equipo también ha desarrollado un protocolo de detección rápida que reduce drásticamente tanto los costos de diseño como la duración de las pruebas. En el futuro, el grupo de investigación planea realizar grandes estudios en animales, como paso previo a los futuros ensayos en humanos. Además de las pruebas preliminares efectuadas en el corazón y la piel utilizando modelos de roedores, también se han realizado pruebas corneales ex vivo.
“Estamos utilizando péptidos para fabricar soluciones terapéuticas. El equipo se inspira en la naturaleza para desarrollar soluciones simples para el cierre de heridas y la reparación de tejidos”, afirma el Dr. Emilio I. Alarcón, profesor asociado de la Facultad de Medicina de la Universidad de Ottawa. “De hecho, nos sorprendió mucho la variedad de aplicaciones que pueden lograr nuestros materiales. Nuestra tecnología ofrece una solución integrada que se puede personalizar según el tejido objetivo”, concluye.