Según datos de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), hechos públicos en su Observatorio del Cáncer, el de próstata es el tumor más frecuente en varones y constituye la segunda causa de mortalidad por cáncer en pacientes masculinos de nuestro país -tras el cáncer de pulmón y el colorrectal-. De este modo, se calcula que en España se diagnosticaron 33.341 nuevos casos de cáncer de próstata y fallecieron por esta causa 6.112 personas en el último año. Además, se estima que en el mundo se diagnostican alrededor de 1.200.000 casos cada año.
En esta línea, llama la atención el trabajo de unos científicos de la Universidad de Cambridge (Reino Unido) y el Instituto de Investigación del Cáncer de Londres, que consiste en una herramienta integral con el fin de predecir el riesgo de una persona de poder desarrollar cáncer de próstata. Denominada 'CanRisk-Prostate', podría ayudar a conseguir que los hombres con mayor predisposición a la enfermedad accediesen a las pruebas adecuadas al tiempo y evitaría que quienes cuenten con un riesgo muy bajo de desarrollar la enfermedad tengan que someterse a pruebas innecesarias y potencialmente invasivas, según publican en el ''Journal of Clinical Oncology'.
"El cáncer de próstata es el más frecuente entre los hombres del Reino Unido, pero el cribado poblacional basado en el PSA no es una opción: estas pruebas suelen dar falsos positivos, lo que significa que muchos hombres se someterían a biopsias innecesarias"
En palabras de Antonis Antoniou, profesor del Departamento de Salud Pública y Atención Primaria de la Universidad de Cambridge, "el cáncer de próstata es el más frecuente entre los hombres del Reino Unido, pero el cribado poblacional basado en el PSA no es una opción: estas pruebas suelen dar falsos positivos, lo que significa que muchos hombres se someterían a biopsias innecesarias. Además, muchos de los tumores de próstata identificados por las pruebas de PSA son de crecimiento lento y no supondrían una amenaza para la vida y el tratamiento de estos tumores puede ser más perjudicial que beneficioso", alerta.
No en vano, la prueba del cáncer de próstata consiste en la actualidad en un análisis de sangre con el fin de buscar (PSA), una proteína conocida como antígeno prostático específico que fabrica la glándula prostática en exclusividad; sin embargo, este procedimiento de detección no es siempre exacto y para poder confirmar el que el diagnóstico del paciente es correcto se requieren pruebas adicionales como resonancias magnéticas o biopsias de tejido. El profesor Antoniou aclara que lo que se necesita “es una forma de identificar a los hombres con mayor riesgo, que nos permita dirigir las pruebas de cribado y diagnóstico allí donde sean más necesarias, reduciendo al mismo tiempo los daños para los hombres con bajo riesgo de padecer la enfermedad”.
'CanRisk-Prostate' es una herramienta que, por primera vez, combina información sobre la composición genética y los antecedentes familiares de cáncer de próstata, que son los factores de riesgo más importantes para desarrollar la enfermedad
'CanRisk-Prostate' es una herramienta que,por primera vez, combina información sobre la composición genética y los antecedentes familiares de cáncer de próstata, que son los factores de riesgo más importantes para desarrollar la enfermedad. De este modo, permitirá ofrecer un estudio de riesgo de cáncer personalizado. “Se trata de un importante paso adelante, ya que permitirá a los médicos hablar con los hombres sobre su riesgo individual de padecer cáncer de próstata basándose en el modelo informático más preciso hasta la fecha. Esto les ayudará a tomar decisiones sobre el cribado", ha afirmado la profesora Ros Eeles, del Instituto de Investigación del Cáncer de Londres y coautora del estudio.
El cáncer de próstata tiene un altísimo componente hereditario y actualmente no existía un modelo de riesgo válidado para este cáncer. Por lo tanto, los investigadores de Cambridge buscaban desarrollar un modelo de riesgo genético que pudiera proporcionar riesgos predichos personalizados sobre la base de variantes patogénicas conocidas de riesgo moderado a alto, variantes genéticas comunes de bajo riesgo y antecedentes familiares de cáncer explícito, y posteriormente validar externamente el modelo en una cohorte prospectiva independiente. No en vano, según Cancer Research UK, anualmente se diagnostica cáncer de próstata a más de 52.000 hombres y supe más de 12.000 muertes. Además, el 78 % de los diagnosticados sobreviven más de diez años, pero esta proporción apenas ha variado en la última década en el Reino Unido.
Al validar su modelo, los investigadores sacaron a la luz que el 86% de los participantes en el biobanco británico que desarrollaron cáncer pertenecían a la mitad de los hombres a los que se les había previsto unos riesgos más elevado
El cáncer de próstata es uno de los cánceres comunes más determinados genéticamente. Como factores asociados a riesgo moderado a alto de este cáncer se señalan las mutaciones defectuosas heredadas de los genes BRCA2, HOXB13 y posiblemente BRCA1. Además, hay varios centenares de variantes genéticas más comunes que aportan cada una un riesgo menor, pero que tomados en conjunto moderan o incrementan el riesgo de cáncer de próstata. Así, los investigadores utilizaron datos genéticos y de antecedentes familiares de cáncer de 16.663 familias afectadas por esta enfermedad. El modelo utiliza datos sobre fallos genéticos poco frecuentes en genes de riesgo moderado a alto y una puntuación de riesgo basada en 268 variantes comunes de bajo riesgo, junto con antecedentes familiares detallados de cáncer, para predecir los riesgos futuros. Todos estos hombres estaban libres de cáncer al inicio del estudio, pero más de 7.600 de ellos desarrollaron esta enfermedad en la década siguiente.
Al validar su modelo, los investigadores sacaron a la luz que el 86% de los participantes en el biobanco británico que desarrollaron cáncer pertenecían a la mitad de los hombres a los que se les había previsto unos riesgos más elevados, lo que sugiere que podría ser posible dirigir las pruebas de cribado y diagnóstico al subgrupo de población de mayor riesgo, entre los que se producirá la mayoría de los cánceres. Según el doctor Tommy Nyberg, de la Unidad de Bioestadística del MRC de Cambridge, se trata de "la herramienta más completa hasta la fecha para predecir el riesgo de que un hombre desarrolle cáncer de próstata. Esperamos que esto ayude a los médicos y asesores genéticos a evaluar el riesgo de sus clientes y ofrecerles el seguimiento adecuado", concluye.