Los biomarcadores son sustancias que pueden revelar desde enfermedades, infecciones e incluso evidencia de trauma emocional y se pueden encontrar en los fluidos corporales de una persona como el sudor, lágrimas, saliva y orina.
Ahora, un equipo de investigadores de la Universidad Estatal de Ohio ha probado con éxito un dispositivo que algún día podría usar biomarcadores químicos en el sudor para detectar cambios en la salud de una persona.
Además de analizar la composición del sudor, los investigadores creen que este sensor algún día podría personalizarse como bioimplantes y usarse para detectar neurotransmisores y hormonas, lo que podría ayudar a identificar trastornos iónicos en el líquido cefalorraquídeo asociados con una lesión cerebral secundaria o incluso conducir a una nueva comprensión de cómo funciona el cerebro.
Los resultados del estudio mostraron que el sensor sí detectó los niveles de glucosa con éxito
En concreto, el estudio demostró que el sensor bioquímico detectó el nivel de glucosa durante el ejercicio. Para ello, el equipo fabricó un "collar inteligente" que, una vez colocado alrededor del cuello, se utilizó para controlar el nivel de glucosa de los participantes del estudio mientras hacían ejercicio. El collar funciona mediante un circuito de resonancia que refleja las señales de radiofrecuencia enviadas por un sistema de lectura externo.
Después de practicar ciclismo en interiores durante 30 minutos, los participantes hacían una pausa de 15 minutos, durante la cual tomaban bebidas azucaradas, antes de reanudar la actividad.
Los investigadores sabían que los niveles de glucosa en el sudor debían aumentar después de tomar las bebidas azucaradas; la cuestión era saber si este nuevo sensor lo detectaría.
Los resultados mostraron que el sensor sí detectó los niveles de glucosa con éxito, lo que sugiere que funcionará para controlar otras sustancias químicas importantes en el sudor.
"El sudor contiene cientos de biomarcadores que pueden revelar información muy importante sobre nuestro estado de salud. La próxima generación de biosensores será tan altamente biointuitiva y no invasiva que podremos detectar información clave contenida en los fluidos corporales de una persona", han asegurado.