La Fundación Amancio Ortega (FAO), del conocido empresario textil de Galicia, anunció durante este año la donación de 320 millones de euros para la adquisición de 290 equipos de alta tecnología para el tratamiento contra el cáncer. Ya en el mes de marzo se alcanzaron los principios de acuerdo con los departamentos de salud de todas las comunidades autónomas para extender su programa de apoyo a la modernización de las unidades de detección y tratamiento radioterápico del cáncer en los hospitales públicos.
Según los especialistas en oncología, cada año se diagnostican en España más de 200.000 nuevos casos de cáncer, de los que al menos un 60% precisan tratamiento por radioterapia en algún momento de su evolución. La incorporación de equipamientos de última generación, tales como la mamografía digital con tomosíntesis o los aceleradores lineales avanzados, permite realizar diagnósticos más precisos y proporcionar a los pacientes tratamientos más eficaces, menos agresivos y de menor duración.
Galicia y Andalucía fueron las primeras regiones donde se empezó a ejecutar el programa de la Fundación de acuerdo con las necesidades identificadas por los profesionales de los servicios autonómicos de salud
Galicia y Andalucía fueron las primeras regiones donde se empezó a ejecutar el programa de la Fundación de acuerdo con las necesidades identificadas por los profesionales de los servicios autonómicos de salud. De este modo, 2018 se presenta como el año en el que se desarrolle de manera plena en todo el territorio nacional en beneficio del paciente.
Los primeros resultados positivos de estas donaciones ya existen. Sin ir más lejos, desde junio hasta diciembre, hasta 30 pacientes del Hospital Reina Sofía de Córdoba, del Servicio Andaluz de Salud (SAS), se han beneficiado del nuevo equipo de radioterapia intraoperatoria donado por la Fundación Amancio Ortega. Este equipo es el primero de sus características en el SAS y el cuarto en el Sistema Nacional de Salud (SNS).
Estas 30 pacientes padecen cáncer de mama y, tras haber sido intervenidas quirúrgicamente, han recibido tratamiento radioterápico. Con el nuevo equipo se ha evitado que después de la operación hayan tenido que recibir entre 15 y 25 sesiones de radioterapia, que suele ser lo habitual en estos casos.