El sector farmacéutico es uno de los más importantes del mundo, ya que se dedica al I+D y comercialización de medicamentos que contribuyen a mejorar la salud y la calidad de vida de las personas. Sin embargo, también es una industria que genera un gran impacto ambiental, debido al consumo de recursos naturales, la generación de residuos y a las emisiones de gases de efecto invernadero.
Es por ello que la sostenibilidad se ha convertido en un factor clave para el éxito y la competitividad de la industria farmacéutica. Desde el sector deben implicarse no solo con el cumplimiento de la normativa vigente, sino también adoptar una visión a largo plazo, basada en el equilibrio entre los aspectos económicos, ambientales y sociales, y en el compromiso con la innovación, la calidad, la seguridad y la eficiencia.
Para lograr una mayor sostenibilidad en la industria farmacéutica, es necesario implementar una estrategia integral que abarque todas las fases del ciclo de vida de los medicamentos, desde la investigación hasta el consumo final. Compañías farmacéuticas como MSD se comprometen a desarrollar diferentes iniciativas y soluciones evolucionando a modelos digitales.
“Llevamos a la práctica este compromiso aplicando estándares de construcción sostenibles, compensando nuestras emisiones directas"
“Llevamos a la práctica este compromiso aplicando estándares de construcción sostenibles, compensando nuestras emisiones directas con una cartera de créditos de carbono de alta calidad, los cuales incluyen su eliminación”, afirma Ana Argelich, directora general de MSD en España, en una entrevista a Salud 35.
Esto, junto con la combinación de la tecnología para tratar los datos de salud existentes y el aprovechamiento de las plataformas de salud, facilitará el desarrollo de soluciones innovadoras, enfocadas a mejorar la calidad de los resultados de la salud con modelos más sostenibles y eficientes.
La compañía apuesta por un enfoque sostenible a nivel internacional. Desde la dirección nos confirman que han realizado la firma de nuevos acuerdos de compra de energía virtual (VPPPA) para proyectos a gran escala con sede en España y en Texas para conseguir su objetivo de utilización del 100% de energía verde.
A su vez, MSD fomenta el enfoque One Health, donde la salud humana, animal y medioambiental forman parte de un todo. Muestra del compromiso de la compañía con la salud ambiental es la aceleración de sus acciones orientadas a alcanzar el objetivo de neutralidad en todas las operaciones para 2025 (15 años antes de lo previsto inicialmente), marcándoses también objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero en el alcance 1 y 2 (-46%) y en el alcance 3 (-30%).
“En España, hemos renovado la flota con coches híbridos y eléctricos, nuestras fábricas disponen de reducción de la huella de carbono y hemos invertido en energía fotovoltaica"
En esta línea, con el fin de reducir el 30% de las emisiones de alcance 1 y 2 en 2030, "trabajamos con nuestros proveedores para seleccionar aquellos que implementan medidas de reducción de su huella de carbono, utilizan mayores porcentajes de energía verde, materiales reciclados, etc", apunta Argelich. A su vez, subraya que “en España, hemos renovado la flota con coches híbridos y eléctricos, nuestras fábricas disponen de proyectos de reducción de la huella de carbono y hemos realizado una importante inversión en energía fotovoltaica instalando placas solares en la fábrica de Salamanca”.
Además, la compañía forma parte del Consejo Empresarial Español para el Desarrollo Sostenible, liderado por Forética, cuyo fin es generar una respuesta estratégica empresarial conjunta ante los retos en materia medioambiental, social y de gobernanza.
La sostenibilidad es un reto, pero también una oportunidad para la industria farmacéutica. Una oportunidad para demostrar su compromiso con la salud y el bienestar de las personas y del planeta, y para generar valor a largo plazo para todos sus grupos de interés.