Los laboratorios farmacéuticos Reig Jofre han inaugurado esta mañana las nuevas instalaciones de ampliación de su planta de Toledo. La compañía catalana, que ha invertido en las obras aproximadamente unos 10.000 millones de euros, dispone de una superficie construida superior a 15.2000 metros y consta de dos plantas de fabricación especializadas en antibióticos betalactámicos.
Al acto de inauguración han acudido, además de Ignasi Biosca, consejero delegado de Reig Jofre, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page; la directora general de Cartera básica de Servicios del SNS, Patricia Lacruz; el consejero de Sanidad, Fernández Sanz; la consejera de Economía, Patricia Franco y la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón.
La ampliación va a suponer una nueva línea productiva dotada con tecnología de última generación
Gracias a la ampliación, la planta dedicada a la producción de antibióticos derivados de la penicilina satisfará las necesidades actuales del mercado nacional e internacional y abordará la entrada en el mercado de Estados Unidos, algo que se espera conseguir el próximo año. Todo esto va a ser posible en gran medida al acuerdo firmado con la compañía Qilu Pharmaceutical, ubicada en China.
Una de las principales novedades que trae consigo la ampliación de la planta industrial es la instalación de una nueva línea productiva dotada con tecnología de última generación, destinada a la producción de medicamentaos inyectables estériles de uso hospitalario.
“Con casi 90 años de historia, nuestra compañía es la quinta farmacéutica española por cifra de negocios cotizada en el mercado continuo, centrada en la investigación, el desarrollo, la fabricación y la comercialización de productos farmacéuticos y complementos nutricionales”, ha explicado Biosca durante su intervención.
Actualmente, Reig Jofre produce el 14% de las unidades de antibióticos consumidos en España y gracias a la nueva línea productiva que se ha inaugurado esta semana se estima aumentar la capacidad de fabricación de estos medicamentos hasta superar el 33%, alcanzado los 25 millones de viales al año, cuando ahora rondan los 19 millones.
Además del aumento de la capacidad de fabricación y de la productividad, otro de los objetivos de la compañía es seguir fomentando el empleo. Las dos instalaciones que hay situadas en Toledo cuentan con 330 trabajadores, un número que estiman poder ampliar en un futuro a corto plazo. “En los últimos 10 años hemos pasado de 117 empleados a los 330 que hay ahora. Nos sentimos muy orgullosos de contribuir tanto a la generación de empleo en Castilla-La Mancha como de dar servicio a la sociedad”, ha afirmado Biosca.