Los Hospitales de Quirónsalud integrados en la red pública madrileña, Fundación Jiménez Díaz, Rey Juan Carlos, Infanta Elena y General de Villalba han celebrado recientemente el taller “Ayudas en los trastornos de lenguaje, Nutrición. Disfagia”, que tienen como objetivo principal informar, promover y optimizar los cuidados de quienes atienden a personas en esta situación de dependencia. Un mensaje que ha dejado claro la nutricionista clínica del hospital mostoleño, Dra. Mercedes Ramírez Ortiz, en esta jornada online que se enmarca dentro del proyecto “Taller de Cuidadores”.
“Nuestro objetivo es facilitar a los cuidadores consejos para abordar el día a día con pacientes dependientes, para quienes lo primordial es mantener un buen estado nutricional a través de una dieta mediterránea, variada y adaptada a las necesidades de cada paciente, y que tenga presente el llamado ‘plato saludable’, que incluye proteína, tanto de origen vegetal como animal, frutas, verduras, hidratos de carbono, grasas saludables y lácteos”, añadió la Dra. Ramírez.
Nuestro objetivo es facilitar a los cuidadores consejos para abordar el día a día con pacientes dependientes
En cuanto a la afasia, María Sánchez Verdugo, logopeda de la Fundación Jiménez Díaz, señaló que se trata de uno de los trastornos más frecuentes en la edad adulta, y que produce dificultades en la comprensión y expresión del lenguaje oral y también escrito. Deteniéndose en la necesidad de la valoración precoz y en la rehabilitación como pilares fundamentales.
Los pacientes con afasia pueden desencadenar también disfagia, siendo transitoria o perdurando en el tiempo. En este aspecto, Beatriz García Botrán, enfermera responsable de Disfagia en el Hospital Universitario Rey Juan Carlos, explicó que la disfagia es una alteración o dificultad para tratar de deglutir los alimentos, tanto sólidos como líquidos y en algunos casos, hasta con la propia saliva. “Entre sus síntomas más comunes destacan la tos y el carraspeo, durante y después de las comidas, y los atragantamientos frecuentes. Como consecuencia de ello puede generarse desnutrición, por lo que es fundamental el asesoramiento de nutricionistas y endocrinólogos”, recalca García.
Trabajar por la mejor calidad de vida del paciente y también del cuidador requiere una labor conjunta de los profesionales de Otorrinolaringología, Logopedia, Endocrinología y Nutrición, y Neurología
En esta misma línea, Lidia Mela Carrillo, enfermera de nutrición enteral en el hospital mostoleño, destacó los beneficios de mezclar ciertos nutrientes en las comidas mediante este tipo de alimentación en aquellos pacientes que no pueden utilizar la vía oral. Una práctica que requiere de la formación a los cuidadores para que puedan aprender las tareas de limpieza de la sonda nasogástrica o simplemente la postura de la persona.
“Trabajar por la mejor calidad de vida del paciente y también del cuidador requiere, en cualquier caso, una labor conjunta de los profesionales de Otorrinolaringología, Logopedia, Endocrinología y Nutrición, y Neurología; y así es como lo llevamos a cabo en nuestros hospitales”, concluyó la Dra. Ramírez.