Merck pide retirar las barreras a la innovación para recuperar la competitividad de Europa

A día de hoy, el 48% de los nuevos tratamientos tienen como origen Estados Unidos frente al 22% de Europa

De izq. a dcha.: Fernando Borredá, Teresa Rodó, Albert Castellanos, Manuel Zafra, Ana Polanco, Claire Skentelbery, Kristin Schereiber y Susana Solis (Foto: Merk)
De izq. a dcha.: Fernando Borredá, Teresa Rodó, Albert Castellanos, Manuel Zafra, Ana Polanco, Claire Skentelbery, Kristin Schereiber y Susana Solis (Foto: Merk)
Salud35
27 septiembre 2023 | 15:10 h

En los últimos años Europa busca recuperar su papel como el centro de atracción de inversión y producción del sector farmacéutico. Este propósito mejoraría la llegada de nuevos medicamentos para todos los pacientes pertenecientes a la Unión Europea, favoreciendo una mejora de la calidad asistencial. Para la compañía Merck, este objetivo debe ser prioritario y, por ello, durante Biospain 2023, el congreso organizado por la Asociación Española de Empresas de Biotecnología (ASEBIO), ha promovido la mesa redonda “Impulsar la industria innovadora para lograr la Autonomía Estratégica Europea”. 

En las últimas dos décadas la región ha perdido su competitividad como lugar de inversión en I+D+i de la industria farmacéutica, cayendo un 10% la inversión del año 2001 al 2020, frente a otros países como Estados Unidos, China y Japón. Según datos publicados por la Federación Europea de Industrias y Asociaciones Farmacéuticas (EFPIA), solamente un 22% de los nuevos tratamientos tienen procedencia europea, en contraposición al 48% que provienen de los Estados Unidos.

"Vivimos momentos de escasez a causa de nuestra dependencia en las importaciones de otros países y territorios"

“Tenemos un problema crónico en Europa. Vivimos momentos de escasez a causa de nuestra dependencia en las importaciones de otros países y territorios, como China. Es importante reconocer la biotecnología como un sector estratégico y crítico para nuestra región, y facilitar su acceso a la financiación por medio de una legislación coherente”, ha señalado Susana Solís, miembro del Parlamento Europeo, y del Grupo Renew Europe, durante la ponencia.

En esta misma línea, Fernando Borredá Juste, secretario general de Industria del Ministerio de Industria de España, ha destacado el papel de la biotecnología, que nos permite “desarrollar nuevos fármacos, equipos, terapias, medicina personalizada, lo cual no solo es bueno para el paciente, sino que también reduce nuestra dependencia del suministro global”.

Por su parte, la directora de Productos Químicos, Sanidad, Venta Minorista y Agroalimentación (DG-GROW) de la Comisión Europea, Kristin Schreiber, ha señalado que “para lograr la autonomía estratégica y la notificación temprana del riesgo de desabastecimiento, tenemos que poner en marcha planes de prevención e intercambiar información entre Estados miembros”.

REDUCCIÓN DE LAS BARRERAS A LA INNOVACIÓN

Desde Merck han apuntado tres líneas de acción para apoyar el desarrollo de una autonomía estratégica europea. En primer lugar, simplificar el marco normativo europeo, lo que implica eliminar regulaciones innecesarias. A su vez, reducir las cargas administrativas para aumentar la agilidad en la respuesta a las necesidades médicas no cubiertas. En último lugar, eliminar las barreras a la inversión, reduciendo costos, fortaleciendo infraestructuras y desarrollando políticas industriales que promuevan el crecimiento sostenible a largo plazo en el sector salud.

Teresa Rodó, Head of Global Healthcare Operations del Grupo Merck, ha resaltado como “es esencial mantener un marco que coloque a la región en una posición de ventaja frente a otros mercados del mundo”. También ha recordado que "la pandemia demostró que cosas que creíamos imposibles, pueden hacerse posibles y acelerarse cuando unimos nuestras fuerzas".

“Proteger la innovación es aún más crítico cuando lo que está en juego es el sector sanitario"

Por último, Manuel Zafra, presidente de Merck en España, ha sido el encargado de concluir el debate, donde ha manifestado que "proteger la innovación es aún más crítico cuando lo que está en juego es el sector sanitario, lo cual influye directamente en el bienestar y el futuro de más de 746 millones de personas. Europa tiene que proteger la salud de sus ciudadanos".

Así, las empresas farmacéuticas tienen un papel protagonista, ya que lideran la inversión en el continente europeo (también en España), invirtiendo más del 12% de sus ventas en I+D, más que ningún otro sector industrial.

Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.
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