Casi un año después de que la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) alertara de problemas en la aplicación Guardian TM Connect, la app de Medtronic para la diabetes, la compañía sigue sin dar una solución.
Ayer, la Aemps volvía a alertar de más problemas en esta aplicación e informaba de que los pacientes que utilizan la aplicación en un iPhone, iPad o iPod Touch, con la versión de software iOS 12 o superior pueden observan una reducción de la batería del transmisor del Sistema de Monitorización Continua de Glucosa Guardian Connect tras una carga completa por lo que deberán actualizar la aplicación a la última versión 3.2.4 lo antes posible.
En las versiones iOS 12 las conexiones Bluetooth son más frecuentes y agotan la batería del transmisor más rápido que con las versiones iOS anteriores
De acuerdo con la información facilitada por la empresa, en las versiones iOS 12 las conexiones Bluetooth son más frecuentes y agotan la batería del transmisor más rápido que con las versiones iOS anteriores. La actualización de la aplicación Guardian Connect a la última versión 3.2.4 a través de la App Store permitirá a la batería del transmisor Guardian Connect volver a tener el rendimiento que tenía antes de la actualización de iOS 12.12.1 y 12.2.
No obstante, pese a las alertas de la Aemps, Medtronic sigue sin dar ninguna solución. Además, el pasado mes de abril, los problemas con sus dispositivos médicos alertaron en todo el mundo. Medios nacionales, internaciones y hasta las redes sociales se hicieron eco de los escándalos protagonizados por el fabricante de dispositivos médicos.
Y es que, el escándalo ha estado marcado por una retirada masiva de sus marcapasos. Precisamente, el pasado mes de febrero, también la Agencia del Medicamento de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) ordenó la retirada de 156.957 marcapasos de doble cámara.
En concreto, se trataba de los modelos Adapta, Versa, Sensia, Relia, Attesta, Sphera y Vitatron debido a un error de software que puede producir una falta de estimulación que puede provocar que los pacientes experimenten latidos cardíacos lentos, presión arterial baja y otros síntomas como mareos, desmayos e incluso la muerte.