La Comisión Nacional del Mercado y de la Competencia (CNMC) ha publicado el ‘Estudio sobre el Mercado de Distribución Mayorista de Medicamentos en España’, que analiza sus problemas principales y plantea diversas recomendaciones para mejorar el funcionamiento del sector.
Este estudio continúa la línea de trabajo iniciada en 2015 con la publicación del Estudio de Mercado sobre la Distribución Minorista de Medicamentos en España.
En ese momento, la CNMC recomendó eliminar restricciones a la apertura y la operación de las farmacias y permitir la dispensación de medicamentos sin receta en otros establecimientos, así como su venta online, siempre respetando los criterios de seguridad y las garantías para la salud pública.
El estudio que acaba de ser publicado se centra en el segmento mayorista del canal farmacia. En él se detectan "numerosas barreras en la distribución de medicamentos a la competencia impuestas por la regulación vigente".
Reclama que los laboratorios puedan vender al precio que deseen y no sea obligatorio dispensar el fármaco más barato para fomentar una competencia real y costes inferiores
También se ofrecen recomendaciones a las autoridades competentes “para mejorar la eficiencia en la comercialización y distribución de medicamentos”.
Una de las principales conclusiones es que en el segmento de los medicamentos innovadores, los protegidos por patente, “hay margen para introducir mejoras en el proceso de evaluación fármaco-económica, que puede conducir a precios más eficientes”.
Respecto a los medicamentos sin patente, “la competencia es posible, porque dejan de estar protegidos por patentes y pueden aparecer medicamentos genéricos y biosimilares”.
Sin embargo, la regulación no incentiva suficientemente la competencia, según la CNMC. Por ello, se ofrece un “análisis comparado de las experiencias internacionales”, con el fin de “introducir más competencia que beneficie a los consumidores y al Sistema Nacional de Salud (SNS), reduciendo su precio”.
Otro punto que es analiza es el diseño del sistema retributivo “orientado al producto en vez de a los servicios al paciente”, que “no permite que los descuentos que se aplican en el canal de distribución beneficien también a las arcas públicas”.
Por todo ello, Competencia realiza una serie de recomendaciones para mejorar el funcionamiento del sector.
REFORZAR LOS IPTs Y PRECIOS DE REFERENCIA “MÁS FLEXIBLE”
Por un lado, plantea reforzar los Informes de Posicionamiento Terapéutico (IPTs) “como documento de referencia completo y transparente para apoyar las decisiones de financiación y precio de medicamentos innovadores, en especial en lo que respecta a la evaluación fármaco-económica”, así como realizar una evaluación continua de la efectividad terapéutica de los medicamentos aprovechando las nuevas tecnologías y el ‘big data’.
Otra de las recomendaciones pasa por implantar un Sistema de Precios de Referencia “más flexible”, permitiendo “más competencia en el precio del medicamento establecido por los laboratorios”.
También reforzar el análisis y la atención a la evidencia sobre la intercambiabilidad de los biosimilares con medicamentos biológicos con objeto de valorar posicionamientos sobre esta cuestión y modificar las políticas de prescripción y dispensación para impulsar la competencia entre medicamentos originales (de marca) y genéricos, fomentando la capacidad de elección del paciente.
SISTEMA DE RETORNO
La CNMC también aboga por un sistema de retorno (conocido también como "clawback"). El objetivo de este sistema es que parte de los descuentos que la industria hace a las farmacias se traslade al SNS.
Además, España no sería el único país de Europa con esta medida. En Reino Unido, por ejemplo, las farmacias comparten un 8% de las rebajas con el sistema de salud de país. También está instaurado en Alemania y Grecia.
Por último, también recomienda desarrollar más campañas de información y educación sanitaria sobre los medicamentos genéricos y biosimilares.