La estampida empresarial en Cataluña no cesa y son muy pocas las empresas catalanas que se arriesgan a permanecer en Cataluña ante la situación política y social perenne en la región desde hace meses.
El desafío independentista ha tenido un resultado fatídico en el tejido empresarial catalán. Y es que, desde que se celebrara el referéndum ilegal el pasado 1 de octubre, son muy pocas las compañías que han decidido permanecer en Cataluña. El procés ha causado estragos en el terreno empresarial y las empresas se han ido marchando.
De hecho, la última compañía del sector salud que ha decidido dejar la ciudad condal ha sido Orkla Cederroth, una compañía que comercializa en España un amplio surtido de productos para el cuidado personal, como bálsamos labiales, aceites no grasos, complementos alimenticios, tapones de oído, plantillas para pies, desodorantes, jabones, champús y dentífricos.
Orkla Cederroth ha sido la última y ha trasladado su sede a Madrid
Tal y como hemos venido contando en Consalud.es, la primera compañía que tomó las riendas de la situación y decidió abandonar Cataluña fue Oryzon Genomics, ahora con su sede social en la capital de España.
A la biotecnológica no tardaron en seguirle otras como SegurCaixa Adeslas, integrada en Grupo Mutua Madrileña, que también trasladó su sede social a Madrid, al igual que Bimbo, Laboratorios Stada, Catalana Occidente, DVD Dental y el Grupo Indukern.
Otras como Idilia Foods, Klockner, Proclinic, Laboratorios Ordesa, Pangea Oncology, Sanantur, Axa España y el laboratorio farmacéutico Uxufarma, también han seguido sus pasos y han dejado atrás Cataluña.
Pero esta amplía lista de empresas del sector salud no ha parado de aumentar a lo largo de estos meses de conflicto. Así, Mutual Médica también anunció que trasladaba “temporalmente” su sede social a Palma de Mallorca, y Gaes que, en esta ocasión, decidió mover su sede social histórica de Barcelona, donde se fundó en 1949, a Alicante.
Linde AG también se sumó a esta extensa lista y trasladó todas sus filiales españolas al municipio valenciano de Puçol, y Boral Química, especializada en la importación y exportación de medicamentos genéricos, también siguió los mismos pasos y se trasladó a la capital de España.
Por el contrario, otras del sector como Grifols y Almirall siguen aferradas a Cataluña y hasta ahora mantendrán sus sedes allí.