Grupo Cardiva, que fabrica, importa, exporta y distribuye dispositivos médicos, entre ellos los packs quirúrgicos de un solo uso, ha lanzado recientemente la bata quirúrgica de protección individual Coverline.
Concretamente, esta bata, disponible en modelos estándar y reforzada, sirve para proteger a los sanitarios y pacientes de los riesgos de infecciones, sobre todo los derivados del coronavirus, ahora que España está inmersa en la 3ª ola y los contagios están disparados.
Coverline es la primera bata quirúrgica de fabricación española de carácter dual y se ha producido siguiendo las exigencias del Reglamento (EU) 2016/425 para su uso básico. Además, ofrece a los sanitarios una óptima protección frente al contagio que se pueda producir por el contacto con pacientes positivos de COVID-19 en hospitales y otros centros médicos.
Coverline es la primera bata quirúrgica de fabricación española de carácter dual y se ha producido siguiendo las exigencias del Reglamento (EU) 2016/425
De tejido SMMMS con buena permeabilidad al aire, hidrófuga y flexible, esta bata presenta alta transpiración, resistencia y aceptable comodidad, lo que permite a quienes la llevan hacer su trabajo de una forma segura y cómoda.
Grupo Cardiva es el único fabricante de material sanitario de ámbito nacional que desarrolla todo el proceso productivo, desde la compra de materias primas hasta el laminado, envasado y puesta en el mercado del producto terminado. Esto permite minimizar los riesgos ante posibles problemas de suministro y garantizar los estándares de calidad más exigentes.
El aumento de la demanda de materiales de un solo uso para proteger a los sanitarios durante la pandemia ha provocado un considerable aumento de la capacidad de producción de la compañía. En 2020, salieron de sus instalaciones de Málaga más de 7 millones de batas y en la actualidad el ritmo de producción es de entre 35.000 y 40.000 batas diarias.
“Nuestro compromiso con el sector sanitario y con el bienestar y seguridad de sus profesionales es firme. Ahora y siempre, la prioridad de la compañía es garantizar la producción y el suministro de equipos de protección y material quirúrgico de la mayor calidad”, asegura Ignacio Vega, presidente del Grupo Cardiva.
Tanto las batas como el resto del material de cobertura quirúrgica de un solo uso se elaboran en la planta de Grupo Cardiva del Parque Tecnológico de Málaga, donde el control de procesos se efectúa gracias a un equipo humano con más de 30 años de experiencia, asistido por la tecnología más avanzada y con la certificación de calidad de todos sus productos y procesos. El grupo también realiza procesos de fabricación en Shanghái.