La Academia Médico-Quirúrgica Española (AMQE) ha organizado el ''Foro de Oncología quirúrgica, demografía, tecnología y humanismo'', patrocinado por Asisa.
La jornada, que se ha celebrado en la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid, se ha centrado en la incidencia del cáncer en términos de salud pública y en su repercusión económica y social así como en los progresos tecnológicos y los resultados en la investigación que están permitiendo obtener importantes avances en el diagnóstico y en el tratamiento de la enfermedad y dibujan un futuro optimista para la oncología.
El profesor Luis Ortiz Quintana, presidente de la AMQE y consejero de Lavinia-Asisa, y el doctor Augusto García Villanueva, jefe del Servicio Quirúrgico del Hospital HLA Universitario Moncloa, han sido los encargados de moderar la sesión.
Ambos han coincidido en señalar que, aunque la cirugía es todavía el arma más eficaz en el tratamiento del cáncer, la estrategia actual se basa en una actuación multidisciplinar para obtener los mejores resultados y establecer tratamientos personalizados. Esto exige al cirujano transversalidad en su formación oncológica, capacidad para la integración y la adaptación al trabajo en equipo y una actualización constante del conocimiento ante los rápidos avances científicos y tecnológicos.
La jornada se ha centrado en la incidencia del cáncer en términos de salud pública y en su repercusión económica y social
Por su parte, la doctora Paloma Navas Gutiérrez, profesora de la Cátedra Asisa-UAM de Gestión Sanitaria y Economía de la Salud, ha llevado a cabo la ponencia ''Oncoprevención en la era del envejecimiento'', en la que se ha establecido que el envejecimiento y el cáncer son dos problemas que hay que ver en conjunto.
Así, tras explicar las características que definen la época actual, que ha señalado como la ''era del envejecimiento'', ha establecido una correlación entre cáncer y envejecimiento y ha destacado la necesidad de incidir en dos factores de riesgo modificables y directamente relacionados con el desarrollo de la enfermedad, como la obesidad y el tabaquismo, y en la importancia de avanzar en los programas de prevención dirigidos a las personas mayores de 65 años.
Por otro lado, el profesor Fernando Noguerales Fraguas, catedrático de Cirugía de la UAH, ha ofrecido en su ponencia ''Innovación en cirugía oncológica. Nuevas tecnologías'' una visión global de las últimas tecnologías quirúrgicas aplicadas a la oncología. Entre las innovaciones más destacadas y que están provocando cambios profundos en la práctica médica, el profesor ha señalado la telemedicina, las aplicaciones móviles, los procedimientos robotizados y la realidad mixta, la cirugía virtual, la cirugía robotizada o la nanocirugía.
El profesor Noguerales ha planteado la necesidad de abrir una reflexión para analizar el papel de las modas en las técnicas y en los modos de investigación tecnológica
Además, ha hecho hincapié en que la biología molecular, la inteligencia artificial o el big data son algunas tendencias actuales que se están desarrollando a gran velocidad y que ofrecen múltiples posibilidades a los profesionales sanitarios. En este contexto de cambio, el profesor Noguerales ha planteado la necesidad de abrir una reflexión para analizar el papel de las modas en las técnicas y en los modos de investigación tecnológica; la presión de la industria de instrumentación en los métodos; y hasta qué punto ha entrado el consumismo en la práctica médica.
Finalmente, el doctor Fernando Álvarez-Ude Cotera, ex jefe del Servicio de Nefrología del Hospital General de Segovia, ha centrado su intervención en el ''Humanismo médico en la era de la tecnología'', en la que se ha enfocado la medicina como una práctica reflexiva a medio camino entre el arte y la técnica.
En este sentido, ha destacado la importancia de combinar el conocimiento y las habilidades científicas con el fomento de unos cuidados respetuosos y compasivos y la sensibilización hacia la autonomía de los pacientes y sus familias. Para ello, ha planteado los puntos de vista diferentes y complementarios que tienen médico y paciente en cuanto a enfermedad y padecimiento y la necesidad de cambiar el modelo de relación entre profesional y paciente a partir de la cordialidad, el respeto, la empatía, la asertividad, la paciencia, la curiosidad o la competencia emocional.