El pasado lunes 12 de junio se celebró en el Centro Azkuna de Bilbao la Jornada ‘Hacia la optimización y eficiencia en el uso de antibióticos en Euskadi’, impulsada por Angelini Pharma. Un evento que reunió a diversas autoridades sanitarias y profesionales de la salud para abordar cómo optimizar el uso de estos medicamentos en la región y combatir la resistencia a los mismos.
La resistencia a los antibióticos en una amplia gama de agentes infecciosos supone una gran amenaza para la salid pública, animal y medioambiental, junto con el bienestar de la economía mundial y el desarrollo. En los últimos años han surgido y se han extendido nuevos mecanismos de resistencia en todo el mundo, amenazando la capacidad de tratar enfermedades infecciosas comunes, lo que desencadena patologías prolongadas, discapacidad e incluso la muerte, al mismo tiempo que se incrementa el gasto médico. Según datos del Ministerio de Sanidad de España, la falta de efectividad de los tratamientos contra las infecciones incrementa un 21% el gasto del paciente.
“Los peligros asociados al progreso de las resistencias presentan dos vertientes: una sanitaria, al originar un incremento significativo de la morbi-mortalidad, y otra económica, por los costes derivados que repercuten sobre la sostenibilidad del sistema”. Para afrontar la cuestión, la OMS aprobó en 2015 un Plan de Resistencia a los Antimicrobianos, al que se suscribió España, entre otros países miembros, con el objetivo de reducir el riesgo de selección y diseminación de resistencia a los antibióticos”, indica Enrique Peiró, coordinador de programas de salud pública y seguridad de Osakidetza.
El evento reunió a diversas autoridades sanitarias y profesionales de la salud para abordar cómo optimizar el uso de estos medicamentos en la región y combatir la resistencia a los mismos
Estos problemas, que se han visto además afectados por la escasez y el estancamiento en el desarrollo de nuevos antibióticos, ponen de manifiesto la necesidad de aplicar acciones que contribuyan a la contención de la resistencia a través de la prescripción adecuada, la educación comunitaria y la vigilancia. En el caso de Euskadi, el consumo de antibióticos en hospitales públicos se calcula en 1,35 dosis diarias por cada 1.000habitantes, ligeramente por debajo de la media española e inferior a años anteriores en la misma región.
Enrique Peiró, en referencia a este tema, explicó que el Servicio de Salud Vasco prioriza la “la generalización y la consolidación” de los programas PROA en el conjunto de sus organizaciones, como “mecanismo esencial” para combatir las resistencias antimicrobianas.
La jornada de este lunes se inauguró con la intervención de Justo Moreno, socio y director del área de salud de BioInnova Consulting, y la de Joel Sabaniego, director de acceso a mercado Iberia en Angelini Pharma, y continuó con las ponencias de algunos de los expertos más relevantes en enfermedades infecciosas y su tratamiento en la región. Además, se organizaron dos mesas de debate con la presencia de farmacéuticos, infectólogos y catedráticos especializados en economía de la salud que alentaron la conversación sobre la optimización de la elección de antibióticos y la búsqueda de la eficiencia de antibióticos long acting.