En la Comunidad Valenciana, la Enfermedad Renal Crónica (ERC) afecta a cerca de 8.000 personas que precisan de Tratamiento Renal Sustitutivo (TRS) y, a pesar de contar con una prevalencia por encima de la media nacional, se trata de una patología que está completamente infradiagnosticada.
En este sentido, AstraZeneca, junto con la Federación Nacional ALCER, la Sociedad Española de Nefrología, ALCER Alicante, ALCER Turia y ALCER Castalia, ha celebrado en la Comunidad Valenciana la jornada ‘Escuchando el silencio: diagnosticando la Enfermedad Renal Crónica’ para fomentar la prevención primaria y secundaria de esta patología a nivel regional.
“Es fundamental desarrollar este tipo de jornadas en las que buscamos fomentar el intercambio de conocimientos, experiencias y mejoras que sirven como base para llevar a cabo planes y acciones efectivos que ayuden en la prevención y detección precoz de esta enfermedad tanto a nivel regional como nacional”, señala Marta Moreno, directora de Asuntos Corporativos y Acceso al Mercado de AstraZeneca.
“Es fundamental desarrollar este tipo de jornadas en las que buscamos fomentar el intercambio de conocimientos"
Este evento tiene como objetivo dar a conocer el impacto y el abordaje de esta patología en Valencia, así como la necesidad de disponer de una estrategia renal regional que cuente con las tecnologías y equipos adecuados para la mejora de la prevención y detección de la ERC.
“El desarrollo de estas jornadas ayuda a que decisores y prescriptores conozcan la situación actual de esta enfermedad a nivel regional y las necesidades y desafíos en el manejo de esta enfermedad”, afirmó el Dr. José Luis Górriz, presidente de la Sociedad Valenciana de Nefrología. “Además, permiten abordar y explorar soluciones innovadoras requeridas para un mejor abordaje en la prevención y diagnóstico de esta enfermedad que afecta a millones de personas en España, provocando una peor calidad de vida en aquellos que se enfrentan cada día a esta patología”, añade.
La ERC es uno de los problemas de salud pública más graves. En España, esta patología afecta al 15% de la población adulta y al 37% de la población española mayor de 64 años. A nivel mundial, son más de 800 millones de personas las que sufren la enfermedad7 y se prevé que en 2040 la ERC se sitúe entre las cinco primeras causas de muerte en el mundo. De hecho, Europa y Estados Unidos han declarado la década 2021-2030 como la década del riñón.
“Debemos poner el foco en el paciente y sus necesidades para evitar el impacto social y económico que provoca esta patología en los pacientes y en el sistema sanitario de salud”
Daniel Gallego, presidente de la Federación Nacional ALCER, ha declarado que dado el aumento de casos tanto a nivel nacional como regional, es necesario fomentar e impulsar mejoras en el abordaje de esta enfermedad desde su prevención y detección precoz, fundamental para evitar que la enfermedad avance, hasta su tratamiento, mejorando la calidad de vida de los pacientes. “Debemos poner el foco en el paciente y sus necesidades para evitar el impacto social y económico que provoca esta patología en los pacientes y en el sistema sanitario de salud”.
En los próximos años, se prevé que esta enfermedad vaya en aumento debido al incremento de factores de riesgo asociados como la diabetes, la hipertensión y la obesidad, así como al envejecimiento de la población. Por todo ello, es necesario establecer un plan asistencial de salud renal que involucre a distintos niveles asistenciales -Atención Primaria (AP) y Nefrología- para que ayuden a minimizar el impacto actual y futuro de la ERC, así como a garantizar una atención de calidad a los pacientes.