Vanda Pharmaceuticals ha anunciado que su junta directiva ha rechazado una segunda propuesta de adquisición de Cycle Pharmaceuticals, con sede en el Reino Unido, según informa Reuters. La oferta, que valoraba a Vanda en 8 dólares por acción (7,35 euros), fue desestimada por ser "económicamente idéntica" a una oferta anterior ya rechazada en junio. A pesar de una prima del 80% sobre el precio de cierre reciente de Vanda, que valoraría a la empresa en 488 millones de dólares (448 millones de euros), la junta consideró que la oferta "subestima sustancialmente" el valor de la compañía y no es lo mejor para sus accionistas.
Esta decisión ocurre en medio de un contexto complicado para la compañía. Recientemente, sus acciones sufrieron una caída del 4,5% tras la negativa de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) de aprobar su medicamento destinado a tratar una afección estomacal que afecta la digestión. Esta noticia generó incertidumbre entre los inversionistas, pero la empresa sigue defendiendo su valor en el mercado.
"Estamos dispuestos a trabajar para llegar a un acuerdo que proporcione una prima atractiva"
Vanda ha sido un objetivo de adquisiciones recurrentes este año. Además de las dos ofertas de Cycle Pharma, la compañía también rechazó, el pasado junio, una oferta de Future Pak, un fabricante por contrato. En respuesta a esta presión, Vanda implementó en abril un plan de derechos de los accionistas, conocido como "píldora venenosa", diseñado para proteger a la empresa de adquisiciones hostiles.
La farmacéutica cuenta con tres productos aprobados en su cartera: Hetlioz, para trastornos del sueño, Fanapt, para el trastorno bipolar I, y Ponvory, que trata la esclerosis múltiple. La empresa insiste en que estos productos y su potencial de crecimiento están subvalorados por las ofertas de adquisición recibidas.
Por su parte, Cycle Pharma sigue abierta a negociar. En un comunicado, la compañía británica afirmó estar "dispuesta a trabajar de inmediato con la junta directiva y el equipo de gestión de Vanda para llegar a un acuerdo que proporcione una prima atractiva y un valor en efectivo seguro para todos los accionistas". Sin embargo, Vanda ha mantenido su postura firme de que la propuesta actual no es adecuada para el futuro de la empresa.
A pesar de los rechazos, el mercado reaccionó de manera positiva. Tras la noticia del rechazo, las acciones de Vanda subieron un 11,37%, cerrando a 4,95 dólares (4,55 euros), lo que indica que los inversionistas aún ven potencial en la empresa, ya sea como objetivo de adquisición o como entidad independiente en crecimiento.