La compañía de análisis de sangre de Silicon Valley, Theranos, está a punto de disolverse meses después de que su fundadora Elizabeth Holmes, y el expresidente Ramesh “Sunny” Balwani fueran acusados de estafar a los inversores.
Según ha informado el Wall Street Journal, esta medida viene del intento fallido de Theranos de vender la compañía, cortejando a más de 80 compradores potenciales.
Por todo ello, la compañía será liquidada en los próximos de seis a doce meses, y planea repartir su estimado de 5 millones de dólares (4,3 millones de euros) en efectivo restante a sus acreedores no garantizados.
Theranos también está incumpliendo su crédito con Fortress Investment Group y debe al menos 60 millones de dólares a los acreedores no garantizados
El pasado mes de junio, los fiscales declararon que Holmes y Balwani utilizaron publicidad y solicitudes para alentar a los médicos y pacientes a utilizar sus servicios de laboratorio de análisis de sangre a pesar de saber que la compañía no podía producir resultados precisos y confiables.
Además, también alegaron que Holmes y Balwani hicieron numerosas tergiversaciones sobre la situación financiera y las perspectivas de Theranos.
Pero, Theranos también está incumpliendo su crédito con Fortress Investment Group y debe al menos 60 millones de dólares (51,6 millones de euros) a los acreedores no garantizados.
Ahora, la compañía está buscando el consentimiento de la junta de accionistas para la disolución corporativa a finales de esta semana y proceder con las acciones a partir del lunes.