La farmacéutica japonesa Takeda se anotó un beneficio neto atribuido de 230.059 millones de yenes (1.672 millones de euros) en el conjunto de su año fiscal, finalizado en marzo, lo que supuso un descenso del 38,8% en comparación con el ejercicio anterior. Durante los meses posteriores, ha tomado una serie de decisiones que le han hecho continuar con esta caída, como la renuncia de la fabricación de su inyección Natpara para el hipoparatiroidismo, tanto en Estados Unidos como en el extranjero para finales de 2024. Takeda ha estado bajo presión para reducir la deuda y desarrollar su cartera de medicamentos para compensar la pérdida de la protección de patentes de medicamentos de franquicia como Vyvanse y Entyvio en los próximos años
De esta manera, obtuvo un beneficio neto atribuido de 166.753 millones de yenes (1.144 millones de euros) en el conjunto de su primer semestre fiscal, finalizado en septiembre, lo que supone una caída del 9,2% respecto a las ganancias que contabilizó en el mismo periodo del ejercicio anterior.
Los ingresos de la empresa entre abril y septiembre fueron de 1,974 billones de yenes (13.544 millones de euros), un 10,1% más. Por segmentos de negocio, la división de gastroenterología creció un 27,3%, hasta 546.200 millones (3.747 millones de euros), mientras que el segmento de enfermedades raras se elevó un 20,7%, situándose en 362.200 millones (2.485 millones de euros).
El beneficio neto atribuido de 166.753 millones de yenes (1.144 millones de euros) supone una caída del 9,2%
Los ingresos del área de terapiasderivadas del plasma para enfermedades inmunológicas crecieron un 1,9%, hasta 314.000 millones (2.154 millones de euros), al tiempo que los de la de neurociencia aumentaron un 29,3%, hasta 302.300 millones (2.074 millones de euros); y los de oncología se contrajeron en un 3,6%, hasta 225.300 millones (1.546 millones de euros).
Los costes asociados a las ventas fueron de 598.327 millones (4.105 millones de euros), un 15,7% más, mientras que los gastos de venta, generales y administrativos avanzaron un 11,2%, hasta 480.214 millones de yenes (3.295 millones de euros). La partida de investigación y desarrollo (I+D) se situó en 297.752 millones (2.043 millones de euros), un 17,2% más.