El uso de la realidad virtual (VR) y la realidad extendida (XR) está revolucionando la industria farmacéutica, proporcionando nuevas formas de optimizar procesos, mejorar la formación de profesionales y acelerar la investigación y el desarrollo de fármacos. Estas tecnologías inmersivas permiten a las empresas farmacéuticas simular entornos de laboratorio, realizar pruebas virtuales y entrenar a especialistas en procedimientos médicos sin riesgos.
En este sentido, en una entrevista en Salud35, Alejandro Seco González destaca que la realidad extendida (XR) permite a las farmacéuticas mejorar la investigación con simulaciones in silico, optimizar la formación de personal y acelerar el desarrollo de fármacos, aunque su adopción debe ser progresiva y basada en la viabilidad costo-beneficio.
¿Cómo están las empresas farmacéuticas adoptando tecnologías de realidad extendida (XR) en sus procesos de investigación y desarrollo?
Poder visualizar o incluso tocar un concepto y entender que ocurre, es fundamental no solo para el que investiga si no también para que el que lo padece. El poder ver desde el interior mismo una proteína, un enzima, receptores, membranas, etc. y poder actuar sobre ellos con simulaciones de Dinámica Molecular o Docking Molecular, lo que se conoce como investigación in silico, es lo que más se esta utilizando hoy en día ya que permite al personal investigador un punto de vista mucho más adaptado a lo que el ser humano esta acostumbrado.
Poder explicar al paciente de esta forma mucho mas interactiva y amigable, también ayuda al paciente a entender la dolencia que padece y como se va a tratar.
También, empresas farmacéuticas conocidas como Pfizer utilizan estas tecnologías en capacitación de personal, entrenamiento, supervisión de procesos, etc. Otras como C4X Discovery utiliza la realidad virtual para visualización de moléculas complejas, habiendo conseguido desarrollar un medicamento para superar adicciones.
No solo se requiere de comprar equipos, sino también el factor humano que este implicado.
¿Cómo pueden las compañías farmacéuticas integrar la XR en su infraestructura existente sin interrumpir los procesos tradicionales?
La adopción de nuevas tecnologías debe ser un proceso gradual. Integrarlas de forma abrupta, solapando con sistemas tradicionales ya funcionales, puede ser un error. La clave está en contar con un departamento especializado que colabore con diferentes áreas sin ser imprescindible en cada fase inicial. Esto permite evaluar la reproducibilidad de los resultados y garantizar una transición eficiente hacia procesos más optimizados y eficaces.
¿Qué factores clave deben considerar las empresas farmacéuticas al evaluar la viabilidad de adoptar XR en sus operaciones?
Sin duda, uno de los factores mas importantes es el factor coste/beneficio. No solo se requiere de comprar equipos (y mantenerlos), sino también el factor humano que este implicado. La industria farmacéutica está siempre a la última, teniendo amplia experiencia a la hora de incorporar nuevas tecnologías en su flujo de trabajo.
Una empresa grande, que tenga unos beneficios establecidos y que se pueda permitir la introducción de este tipo de tecnologías en alguno de sus sectores, es muy probable que se beneficie de estos a largo plazo y no inmediatamente.
La realidad extendida aun es un campo en desarrollo que dependiendo de la estrategia a seguir puede ser un riesgo, no solo en términos económicos si no también en cuestión de resultados. Los métodos tradicionaleshan de validar la utilización de la XR. Tener en cuenta el panorama actual en lo que rodea a esta tecnología es importante para la toma de decisiones.
¿Qué incentivos existen para que las empresas farmacéuticas apuesten por la integración de XR a pesar de los costos iniciales elevados?
Tecnologías como esta permite de una forma visual e intuitiva acceder a una gran cantidad de datos, lo que permite el procesamiento de estos de una forma más rápida.
Como comenté previamente, es sabido que la liberación de un fármaco al mercado requiere de una cantidad de tiempo elevada debido a los muchos filtros a los que se somete desde su diseño, escalado, hasta su distribución, y es por eso que un mejor producto, en un periodo de tiempo mas corto, al final se traduce en beneficios para la empresa.
Dejando a un lado el dinero, la mejora de las intervenciones, un mejor entrenamiento de los investigadores, una mayor accesibilidad a visualización de datos, lo que conlleva a una mejora en el desarrollo de producto, atención al paciente y como fin último la resolución de problemas de salud en el menor tiempo posible, debería ser, y es, también un gran incentivo para estas empresas.