Registran un nuevo fracaso en el cáncer de pulmón de células no pequeñas (CPCNP) metastásico con la última serie de pérdidas clínicas para la combinación de Exelixis y el inhibidor de la tirosina quinasa de Ipsen, Cabometyx, y la estrella de la inmunooncología de Roche, Tecentriq.
Desde Fierce pharma apuntan que el pasado viernes, Ipsen emitió un comunicado de prensa en el que revelaba que esta combinación había obtenido buenos resultados en su criterio principal de valoración en el estudio de fase 3 Contact-01. Un ensayo que contó con 366 pacientes que recibieron Cabometyx y Tecentriq contra la quimioterapia docetaxel en pacientes con CPCNP no mutado cuya enfermedad progresó durante o después del tratamiento con un inhibidor del punto de control inmunitario y quimioterapia con platino. Los resultados detallados no se incluyeron en el comunicado de la compañía, aunque es evidente que no fueron positivos.
El ensayo que contó con 366 pacientes que recibieron Cabometyx y Tecentriq contra la quimioterapia docetaxel en pacientes con CPCNP no mutado
Los resultados son un duro golpe no solo para Roche e Ipsen, sino también para Takeda y Exelixis, el desarrollador original de Cabometyx. Exelixis otorgó a Ipsen los derechos para vender y desarrollar el inhibidor TKI fuera de los EE. UU. y Japón, lugar en donde Takeda tiene un acuerdo similar de marketing e investigación y desarrollo.
Las malas noticias para ambas compañías se han ido repitiendo a lo largo de los últimos años, en marzo, Cabometyx y Tecentriq abandonaron un estudio de fase 3 contra Nexavar de Bayer en cáncer de hígado recién diagnosticado, lo que llevó a Exelixis a cancelar los planes para una expansión de la etiqueta Cabometyx en ese uso, y en 2021 fracasaron en el objetivo de prolongar la vida de los pacientes con carcinoma hepatocelular no tratado previamente.