En los últimos meses, la popularidad de los medicamentos con semaglutida, inicialmente desarrollados para el tratamiento de la diabetes tipo 2, han dado un vuelco en su uso y se han enfocado en la pérdida de peso. Esta notoriedad no se debe solo por su eficacia, sino también por el respaldo de figuras públicas y la cobertura mediática que ha destacado su potencial. Concretamente, Ozempic y Wegovy, ambos medicamentos de la compañía danesa Novo Nordisk, han revolucionado el mercado llegando a ser de los medicamentos más vendidos. Estos fármacos han conseguido superar los 12.877 millones de eurosen ventas en 2023, contabilizando un aumento del 66% en comparación al año pasado.
Sin embargo, la creciente demanda de semaglutida ha llevado a preocupaciones sobre la escasez en las farmacias, especialmente en los Estados Unidos, donde su uso se ha extendido más allá de las indicaciones médicas aprobadas. Debido a esto, la compañía ha comunicado recientemente que aumentaría la producción. En noviembre del pasado año, anunció una inversión de 5.518 millones de euros en una expansión de sus instalaciones de fabricación en Dinamarca, y poco después, comunicó que invertiría 2.100 millones de euros para expandir su producción de ambos medicamentos en Francia.
Actualmente, se encuentran en desarrollo al menos 15 versiones genéricas de los medicamentos de Novo Nordisk
El notable éxito de estos fármacos ha provocado un aumento de la competitividad en el mercado. El principal competidor internacional de Novo en este mercado es Eli Lilly con su medicamento Zepbound, nombre comercial utilizado en EEUU para el control del peso, y para tratar la diabetes tipo 2. Es importante matizar que este farmaco es conocido como Mounjaro en Europa. Este se empezará a vender en España en las farmacias a partir del 1 de julio. Costará 271 euros y no está financiado por Sanidad. Por otro lado, en los últimos meses el mercado del genérico se encuentra a la espera de la inminente expiración de la patente de Ozempic.
Los fabricantes de China están a la espera de aprovechar la oportunidad para ingresar al mercado. En este momento, se encuentran en desarrollo al menos 15 versiones genéricas de los medicamentos de Novo, lo que podría impactar significativamente en los precios y la accesibilidad de estos tratamientos. Los expertos sugieren que la introducción de genéricos podría reducir los precios en aproximadamente un 25%. Actualmente, una dosis semanal de Ozempic cuesta alrededor de 100 dólares en los hospitales públicos chinos.
UN PROBLEMA DE SALUD GLOBAL
Además, a esta competencia hay que sumarle que la compañía Novo Nordisk también enfrenta otros desafíos significativos. El pasado año, se detectaron un total de tres lotes falsificados de Ozempic en Brasil, Reino Unido y Estados Unidos. La Organización Mundial de la Salud (OMS) explica que pese a que estas han sido las primeras notificaciones oficiales, en el mercado se ha observado un aumento de los informes de productos de semaglutida falsificados en todo el mundo desde hace dos años.
La subdirectora general de Medicamentos Esenciales y Productos Sanitarios de la OMS, la Dra. Yukiko Nakatani aconseja desde la organización a todos los actores del sector sanitario y a los pacientes que estén pendientes de las falsificaciones de medicamentos. “Hacemos un llamado a las partes interesadas para que dejen de usar medicamentos sospechosos e informen a las autoridades pertinentes”, pone de relieve.
“Hacemos un llamado a las partes interesadas para que dejen de usar medicamentos sospechosos e informen a las autoridades pertinentes”
En la actualidad, la OMS está desarrollando una guía de orientación rápida sobre el posible uso de los agonistas del receptor del péptido 1 similar al glucagón (GLP-1 RA), que incluyen medicamentos como las semaglutidas. Esta guía se centra en el tratamiento de la obesidad en adultos y forma parte de un enfoque integral de atención médica. Los GLP-1 RA son utilizados originalmente para tratar la diabetes, ya que ayudan a reducir los niveles de azúcar en sangre y promueven la pérdida de peso.
La compañía danesa no es la única que está sufriendo a manos de estas falsificaciones. El mismo día que la OMS hizo pública su preocupación, la compañía Eli Lilly publicó una carta abierta en la que subraya su preocupación por la venta online y en redes sociales de versiones falsificadas y compuestas de tirzepatida, que no cumplen con los estándares de seguridad y eficacia de los productos originales de Lilly
Por otro lado, reafirma que no promueve ni fomenta el uso de sus medicamentos para la pérdida de peso con fines cosméticos. “Las publicaciones, videos y anuncios en las redes sociales que promueven el uso de Mounjaro y Zepbound en personas menores de 18 años son inapropiados y pueden exponer a las personas a riesgos significativos porque la seguridad y eficacia de estos fármacos no se han establecido en personas de esa franja de edad”, explica la empresa.
Debido a esto, Lilly está tomando acciones legales contra varios spas médicos, centros de bienestar y varias clínicas que venden productos que afirman tener tirzepatida para la pérdida de peso cosmética. La compañía Novo Nordisk ha presentado también un total 12 demandas debido a esta situación. En la actualidad, se han resuelto dos contra un spa médico y una clínica en Florida a principios de este año.