La farmacéutica suiza Novartis publicó la semana pasada su cuenta de resultados del tercer trimestre de 2022, marcada principalmente por el descenso del 43% respecto a las ganancias contabilizadas en el mismo periodo del año anterior.
Ya en el pasado mes de junio, tras los resultados del segundo trimestre que señalaban una caída del 41% en el beneficio neto, desde Novartis anunciaron un plan de ahorro de aproximadamente 1.500 millones de dólares (1.492.916.601 euros) que podría suponer unos 8.000 despidos hasta 2024.
Durante los meses del tercer trimestre, la compañía ha comenzado a tomar medidas como el despido de 1.400 puestos de trabajo en Suiza, que no entrarán en vigencia hasta el verano de 2023 o el caso de los 400 despidos en su centro de servicio global en Elm Park, Dublín, para finales de 2024. Novartis decidió combinar sus operaciones en un solo departamento con el objetivo de tener nueva estructura más ágil, de esta manera, de los 1.000 empleados que forman parte de la oficina regional, pasarán a ser 600.
Plan de ahorro de aproximadamente 1.500 millones de dólares que podría suponer unos 8.000 despidos hasta 2024
En esta misma línea de cambios ante el panorama que atraviesa la farmacéutica suiza, en agosto anunciaron que esperan ejecutar el próximo año la separación del 100% de su división de genéricos y biosimilares, Sandoz, que supone un 18% del total de ventas de Novartis.
ESPAÑA: ERE
En España, también se han podido observar recortes. En un comunicado reciente informaban sobre un expediente de regulación de empleo (ERE) de entre 220 y 240 personas.
La empresa ha justificado dicha decisión con la evolución en los últimos años de su modelo de trabajo, ya que antes tenían gastos operativos elevados que limitaban la capacidad de invertir en actividades esenciales como la I+D y las licencias. Los despidos afectarán a la parte operativa, posiciones de campo y de oficina, y no a las plantas productivas.