La compañía farmacéutica MSD ha anunciado la adquisición de la empresa biotecnológica Modifi Biosciences por un monto que podría alcanzar los 1.300 millones de dólares (1.206 millones de euros), como parte de su estrategia para ampliar su cartera de terapias experimentales contra el cáncer segúninforma Reuterss.
La farmacéutica estadounidense pagó 30 millones de dólares (27 millones de euros) por adelantado y Modifi podría recibir pagos adicionales en función de hitos alcanzados en el desarrollo de una nueva clase de terapias, conocidas como KL-50. Estas están enfocadas en tumores cerebrales difíciles de tratar, como los glioblastomas, que presentan grandes retos para la medicina moderna.
Modifi recibió 27 millones de euros por adelantado a laespera de pagos adicionales
Modifi Biosciences, una compañía en fase preclínica ubicada en New Haven, Connecticut, se especializa en desarrollar terapias que eliminan selectivamente las células cancerosas al modificar su ADN, lo que permite un tratamiento más preciso y con menos efectos secundarios en comparación con las terapias tradicionales. A pesar de estar en sus primeras etapas de desarrollo, la empresa ya ha recaudado 10,7 millones de dólares (9,3 millones de euros) en financiación inicial y cuenta con el respaldo de importantes inversores, incluyendo el brazo inversor de la Sociedad Estadounidense del Cáncer, BrightEdge.
MSD ha estado intensificando sus esfuerzos por adquirir nuevas tecnologías que le permitan mantener su liderazgo en el sector oncológico, particularmente ante la esperada pérdida de la patente de su exitoso fármaco Keytruda hacia finales de esta década. Keytruda ha sido uno de los tratamientos más importantes en la inmunoterapia contra el cáncer, por lo que la compañía está en la búsqueda activa de nuevas opciones que puedan compensar la futura caída en ingresos.
En esta línea, el año pasado, MSDcerró un acuerdo con la farmacéutica japonesa Daiichi Sankyo por 5.500 millones de dólares (5.105 millones de euros) para desarrollar conjuntamente tres terapias dirigidas contra el cáncer, conocidas como conjugados de anticuerpos y fármacos. Estas terapias actúan como "misiles guiados", atacando directamente las células tumorales sin dañar el tejido sano, una innovación que promete transformar el tratamiento del cáncer en los próximos años.