La compañía farmacéutica Merck ha invertido más de 300 millones de euros en un nuevo centro de producción de bioprocesamiento en Daejeon, Corea del Sur. Este nuevo emplazamiento se ha convertido en la mayor inversión realizada por el sector empresarial de ciencias biológicas de Merck en Asia-Pacífico hasta la fecha. Una vez más la empresa demuestra su compromiso para ampliar sus capacidades en esta región de rápido crecimiento.
"La región de Asia y el Pacífico alberga un gran número de instituciones que llevan a cabo investigaciones, fabricación y servicios innovadores y de vanguardia en áreas como la biotecnología, el ARNm y la terapia génica", afirmó Matthias Heinzel, director general de Ciencias de la Vida de Merck, y miembro del Consejo Ejecutivo.
La instalación se convertirá en un apoyo fundamental para las empresas farmacéuticas y de biotecnología en el desarrollo de procesos, la investigación clínica y la fabricación comercial de productos biológicos. Estos se refieren a productos como vacunas, terapias celulares y genéticas, o terapias basadas en proteínas, como los anticuerpos monoclonales.
“Ampliar nuestra presencia en la región nos acercará aún más a nuestros clientes"
Además, este nuevo centro proporcionará productos biotecnológicos esenciales, como medios de cultivo celular en polvo seco, líquidos de proceso, fabricación a pequeña escala pre-GMP y sistemas de muestreo estériles. Por otro lado, Merck espera que la inversión cree aproximadamente 300 puestos de trabajo adicionales para finales de 2028.
“Ampliar nuestra presencia en la región nos acercará aún más a nuestros clientes en este mercado dinámico y en evolución. Nuestro objetivo es fomentar una colaboración profunda para aumentar la velocidad a la hora de llevar nuevas terapias a los pacientes”, concluye Heinzel.
La nueva sede de Merck en Corea del Sur forma parte de un programa de inversión de varios años. La meta de la compañía es aumentar la capacidad y las posibilidades del sector empresarial de ciencias biológicas de Merck para respaldar la creciente demanda mundial de medicamentos críticos y realizar contribuciones significativas a la salud pública.