Investigadores surcoreanos irrumpieron el miércoles en la oficina de McDonald's en Seúl, después de que varias personas se quejaran de que varios menores se habían enfermado tras comer hamburguesas que supuestamente no estaban cocidas.

Según varios informes, la oficina del fiscal del distrito central de Seúl ha confiscado algunos documentos y pruebas en las instalaciones de McDonald's, así como en otras tres compañías, incluido un proveedor de ingredientes.

Y es que, el pasado mes de julio, según detalla Reuters, un consumidor presentó una denuncia contra la empresa estadounidense, y dijo que a su hija de 4 años se le diagnosticó síndrome urémico hemolítico, más conocido como “la enfermedad de la hamburguesa”, tras sufrir un daño renal irreversible después de consumir una hamburguesa de McDonald's el año pasado.

"La oficina del fiscal del distrito central de Seúl confiscó algunos documentos y pruebas en la oficina y otras tres compañías, incluido un proveedor de ingredientes"

Las quejas también fueron presentadas por los padres de cuatro niños que enfermaron tras comer estas hamburguesas.

De igual modo, en agosto, los clientes de un McDonald’s de la ciudad sudoccidental de Jeonju reportaron dolores estomacales y fiebre después de comer hamburguesas ‘bulgogi’. Fue a raíz de ahí, cuando la cadena detuvo temporalmente las ventas de este tipo de hamburguesas, lanzadas en 1997, para determinar la causa.

En ese momento, la compañía dijo que estaba cooperando con una investigación del gobierno de Corea del Sur sobre el posible caso de contaminación de alimentos.