Los polvos de talco han vuelto a jugar una mala pasada a Johnson & Johnson. Tras las recientes victorias y derrotas, Johnson & Johnson ha culminado el mes de mayo con un nuevo revés por sus polvos de talco.
Y es que, un jurado de Nueva York ha ordenado a la compañía a pagar 325 millones de dólares (288,8 millones de euros) tras las acusaciones de que sus polvos de talco, supuestamente contaminados con amianto, habrían provocado un mesotelioma a la demandante.
Después de un juicio de cuatro meses, la compañía tendrá que pagar 300 millones de dólares (266,6 millones de euros) en daños punitivos, 20 millones de dólares (17,7 millones de euros) por el dolor pasado y futuro de la demandante, más cinco millones de dólares (4,4 millones de euros) a su esposo.
Una portavoz de la compañía ha indicado que "el juicio sufrió importantes errores legales y probatorios que Johnson & Johnson cree que justificarán una revocación en la apelación"
Johnson & Johnson ha declarado que planea apelar, tal como lo ha hecho en los otros casos de talco que ha perdido. Una portavoz de la compañía ha indicado que "el juicio sufrió importantes errores legales y probatorios que Johnson & Johnson cree que justificarán una revocación en la apelación".
Por su parte, los abogados de los demandantes han asegurado que presentaron documentos internos de J&J que se remontan a los años 60 y 70 y que demuestran que la compañía sabía que sus polvos de talco para bebés contenían amianto.
En lugar de colocar una advertencia en el producto o cambiar a una alternativa de talco, J&J cambió sus métodos de prueba a aquellos que no pudieron detectar el amianto. No obstante, la compañía ha insistido en que sus polvos nunca han contenido amianto.