Se acaba un año lleno de polémicas, pero si una de ellas ha causado graves quebraderos de cabeza a Donald Trump, presidente de Estados Unidos, es la ola de adicción a los opiáceos. Y es que, a lo largo de este año, no solo se han disparado los casos de adictos y muertes por el consumo abusivo de fármacos analgésicos, sino que se ha desvelado que diferentes empresas se habrían lucrado a costa de fomentar su consumo.
De este modo, la farmacéutica Endo fue obligada a retierar del mercado sus medicamentos con opiáceos, según explicó en su momento Scott Gottlieb, jefe de la FDA, Estados Unidos se enfrenta a una "crisis de salud pública" y "debemos tomar las medidas necesarias para reducir el alcance del uso indebido y del abuso de opioides".
Galena Biopharma o Insys han sido acusadas de sobornar a médicos para que prescribieran sus fármacos opióides
Además, otras compañías comoMylan, Purdue PharmaoInsys Therapeutics, han estado durante este año bajo la lupa de las autoridades, quienes investigan si las empresas farmacéuticas han tenido un papel clave en la sobreutilización y sobreprescripción de opiáceos.
Y es que, por ejemplo,Galena Biopharma fue acusada de sobornar a médicos para inducirles a prescribir su opioide para el dolor, por lo que pagó más de 6,2 millones de euros para saldar sus problemas con la justicia.
A otras compañías no les ha servido sacar el talonario... Así, John Kapoor, fundador de Insys Therapeutics, se ha visto en la obligación de dimitir tras ser acusado, también, por sobornar a doctores para que recetasen su fármaco opiáceo.
Sin duda alguna, todas estas compañías no han acabado con buen pie este 2017, por lo que estarán deseando que comience 2018 para ver si su futuro cambia de suerte.