El fiscal general de Virginia Occidental ha instado a un juez a responsabilizar a las compañías Johnson & Johnson, Teva Pharmaceuticals y Allergan por causar un " tsunami" de la adicción a los opiáceos en el estado.
Tal y como recoge la agencia de noticias Reuters, el fiscal general Patrick Morrisey ha declarado que “la epidemia ha afectado prácticamente a todo Virginia Occidental”: "Nuestra demanda habla por todos los habitantes de Virginia Occidental que han sufrido debido a la conducta ilegal, insensible y destructiva de los acusados".
Los fabricantes de medicamentos han sido acusados de crear una "molestia pública" al engañar a los prescriptores sobre los riesgos de los analgésicos opioides, lo que llevó a un aumento en el abuso de sustancias y muertes por sobredosis.
Los fabricantes de medicamentos han sido acusados de crear una "molestia pública" al engañar a los prescriptores sobre los riesgos de los analgésicos opioides
Hasta el momento, las empresas han negado las acusaciones. El abogado de Teva ha dicho que la comercialización de opioides por parte de la compañía no condujo a ninguna receta "médicamente innecesaria" en Virginia Occidental.
Johnson & Johnson y los tres distribuidores de medicamentos más grandes de Estados Unidos, AmerisourceBergen, Cardinal Health y McKesson, han llegado a acuerdos a nivel nacional por un valor de 26.000 millones de dólares (23.705,7 millones de euros) para resolver reclamos de opioides del gobierno estatal y local. Virginia Occidental fue uno de los cinco estados que no firmaron la parte de Johnson & Johnson de ese acuerdo.
Por su parte, el fabricante de medicamentos Endo International, que fue coacusado en el caso, llegó a un acuerdo de 26 millones de dólares (23,7 millones de euros) con West Virginia el pasado 30 de marzo. Se han presentado más de 3.300 demandas contra fabricantes de medicamentos, distribuidores y farmacias por la crisis de opiáceos.